La Administración de Donald Trump anunció una nueva medida para restringir visas a funcionarios extranjeros que, según su criterio, contribuyan al flujo migratorio irregular hacia Estados Unidos.
El secretario de Estado, Marco Rubio, confirmó la política este 5 de marzo, asegurando que los países a lo largo de las rutas migratorias deben asumir su responsabilidad en la prevención y disuasión del tránsito de personas que buscan ingresar ilegalmente al territorio estadounidense.
“Los países a lo largo de las rutas migratorias deben hacer su parte para prevenir y disuadir el tránsito de extranjeros que buscan ingresar ilegalmente a Estados Unidos”, declaró Rubio en un comunicado.
¿A quiénes afectará esta medida?
La restricción de visas se aplicará a funcionarios gubernamentales de otros países, en especial a aquellos involucrados en migración, aduanas, aeropuertos y puertos, así como a cualquier persona que, según Estados Unidos, facilite deliberadamente la inmigración ilegal.
“Estas medidas se mantendrán hasta que dichos funcionarios asuman la responsabilidad de garantizar que se establezcan políticas y se apliquen las leyes vigentes para impedir el tránsito de esas personas”, explicó Rubio.
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Ampliación de políticas previas
Esta nueva política expande una restricción impuesta en 2024 bajo la administración de Joe Biden, que limitaba las visas a ejecutivos de aerolíneas y empresas de transporte que facilitaran el traslado de migrantes indocumentados.
Con esta decisión, la Casa Blanca refuerza su postura en contra de la migración irregular, presionando a gobiernos extranjeros a endurecer sus controles fronterizos y aplicar medidas más estrictas para frenar el flujo migratorio hacia Estados Unidos.
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