CIUDAD DE MEXICO, 27 de noviembre (El Financiero/SinEmbargo).- El Gobierno de Andrés Manuel López Obrador destinará en lo que resta del sexenio 2.3 billones de pesos para reducir el rezago del desarrollo de vivienda en México.
Este miércoles, en la presentación del Programa Nacional de Vivienda 2019-2024, Román Meyer Falcón, secretario de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu) dijo que se busca beneficiar con 5.4 millones de acciones (financiamientos y apoyos) a 20 millones de personas.
Las metas del programa son disminuir en 2.2 millones el rezago habitacional, crecer 11 por ciento el sector de la vivienda hacia 2024 y recortar en 25 por ciento el costo de los trámites.
“Uno de cada tres hogares no tienen escrituras, uno de cada cinco necesitan mejorar o ampliar su vivienda, pero 3 de cada 10 son extorsionados, necesitamos cambiar esta realidad”, explicó el funcionario.
Carina Arvizu Machado, subsecretaria de Desarrollo Urbano y Vivienda, mencionó que el programa será coordinado por Sedatu, donde estarán participando Sociedad Hipotecaria Federal, Comisión Nacional de Vivienda, Infonavit y Fovissste.
“Este programa es pionero en el mundo por su alineación a los criterios de vivienda adecuada de la ONU; sus objetivos y estrategias fueron construidos con diversos actores de los sectores privado, público y social a través de foros, mesas de diálogo y reflexiones en todo el país”, expuso.
Banxico baja el estimado del PIB al 0.2 % en 2019
La Junta de Gobierno del Banco de México (Banxico) recortó, por cuarta vez en el año, la perspectiva de crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) del país al rango del -0.2 al 0.2 por ciento en la actividad económica nacional.
El gobernador del Banxico, Alejandro Díaz de León Carrillo, afirmó que el organismo a su cargo ha conducido “la política monetaria en un entorno de marcada incertidumbre, debido tanto a factores externos, como internos”.
Por ello, la Junta decidió que para 2019 se revisara a la baja, de un intervalo de entre 0.2 y 0.7 por ciento, del trimestre anterior, a uno entre -0.2 y 0.2 por ciento. Para 2020 el intervalo se movió de 1.5 y 2.5 por ciento a uno de entre 0.8 y 1.8 por ciento y para el tercer año de este Gobierno, (2021) se estimó una variación del PIB en un intervalo de entre 1.3 y 2.3 por ciento.
El dato colocado por debajo del cero por ciento no se había observado desde la crisis financiera de 2009, cuando el banco central también pronosticó el cierre de año en números rojos. Además, desde el segundo trimestre de 2018 ha sido constante el recorte del pronóstico de crecimiento, desde el rango de 3.2 a 2.2 por ciento a uno del 2.8 a 1.8 puntos porcentuales.
En el mercado financiero mexicano se ha mostrado un mejor desempeño propiciado por el relajamiento en las condiciones financieras globales.
“El ajuste para 2019 incorpora el hecho de que la información más reciente muestra una debilidad de mayor magnitud y duración a la anteriormente prevista, así como la expectativa de que el crecimiento en el cuarto trimestre del año se vea afectado por una menor actividad en el sector automotriz”, afirmó Banxico en el reporte de julio a septiembre.
Para el próximo año la expansión esperada respondió a la expectativa de una recuperación en los componentes de la demanda interna, pero más gradual que lo anticipado, en un entorno de la producción industrial en Estados Unidos menor a la anticipada, también.