Edomex, el más peligroso para mujeres

CIUDAD DE MEXICO, 14 de diciembre (Infobae).- Al iniciar esta semana un hombre de 34 años mató a su esposa de 19 y a sus pequeñas hijas antes de suicidarse. Otra mujer, una maestra de danza de la UAEM fue asfixiada por su expareja que confesó que la mató “por celos”.

La violencia contra la mujer sigue el mortal promedio en el Estado de México, que ha gestado incluso a feminicidas seriales.

El caso de Juan Carlos Hernández Bejar, el “Monstruo de Ecatepec” cimbró a todos los mexicanos, ya que en complicidad con su esposa Patricia Martínez Bernal, mató a entre 10 y 20 mujeres. Odiaba a su madre y a las mujeres en general, a su pareja también la quería matar pero su sumisión le era útil en sus retorcidos planes.

“Prefiero que mis perritos coman carne de estas mujeres a que ellas sigan respirando mi oxígeno, mil veces que coman los perritos y las ratas a que ellas sigan caminando por ahí”, dijo en su primera confesión ante los peritos.

Al cuestionarle si ha recibido atención sicológica indicó: “Yo estoy bien, yo estoy bien, lo que hago está bien patrón, porque estoy limpiando el mundo de porquería, yo estoy completamente sano y bien”.

Durante el interrogatorio a Juan Carlos “N”, de 38 años de edad, no se le ve alguna señal de remordimiento, incluso asegura que mientras él siga vivo, y si es que llega a salir libre de cualquier delito, continuará asesinando mujeres.

A pesar de la gravedad del caso, los feminicidas han asumido una actitud completamente desvinculada de culpa. Incluso durante la audiencia ambos acusados sonrieron cuando la juez dio a conocer que los dos incurrieron en el canibalismo.

Otro estremecedor caso fue el de Óscar García Guzmán, el feminicidia serial de Toluca, que fue detenido apenas la semana pasada y mientras en su casa se encontraron los cadáveres de tres mujeres y su propio padre biológico, él asegura que fueron hasta siete, que con todas tuvo relaciones sentimentales y que era fácil envolverlas.

“Me dijo cosas horribles de las mujeres, que nosotras teníamos la culpa de que nos mataran porque era fácil enredarnos, que éramos putas todas. Yo no soy experta, pero su personalidad muestra baja autoestima. Ni siquiera era un tema de violación por lo cual mataba mujeres, era un tema de poder, de ‘yo tengo el control de la vida de quien yo quiera’”, dijo la activista Frida Guerrera en entrevista con Infobae México, cuando el mismo asesino le enviaba mensajes, que fueron claves para finalmente atraparlo.

El Estado de México es el que tiene mayor concentración de población, viven más de 16.19 millones de personas, según el último censo de 2015.

Tiene particulares factores que hacen vulnerables a las mujeres, el machismo arraigado aunado a la pobreza, hacen un caldo de cultivo para que se gesten este tipo de acciones.

Corte aquí y lo demás para el cambio

“Yo no creo que hayan cambiado los patrones de comportamiento, me parece que se visibilizan más, siempre han estado así. Las mujeres muchas veces no tienen los recursos económicos para separarse y se aguantan o incluso se justifican, ‘es que es buen padre’, ‘sí me quiere, tal vez cambie’, porque por un lado tienen la carga completa de los hijos y ven difícil hacerle frente solas”, explicó la psicóloga Feggy Ostrosky.

El Estado de México ocupa el segundo lugar en feminicidios después de Veracruz, pero el primero en más incidentes de violencia, ocupan más del doble en llamadas al 911.