CIUDAD DE MEXICO, 24 de marzo.- La Secretaria de Gobernación Olga Sánchez Cordero dijo que el Gobierno de México acepta públicamente la crisis de Derechos Humanos y en particular de personas desaparecidas. Reconoció que las investigaciones avanzan lento, que hay una crisis forense y prácticamente no hay sentencias en materia de desaparición.
Sánchez Cordero denunció que la Comisión Nacional de Búsqueda no contó con apoyo federal, por lo que la presencia de los gobernadores y responsables de distintas áreas son una muestra de que están comprometidos con las víctimas. “Las desapariciones no solo deben ser motivo de indignación, deben ser motivo para investigar a los responsables y llevarlos ante la justicia. Hermanémonos con esta causa porque es una herramienta para armonizar el país”, dijo.
La funcionaria llamó a todos los gobernadores a que dentro de tres meses ya cuenten con comisiones de búsqueda y fiscalías especializadas en esta materia. “Las familias no deben vivir con zozobra, su dolor es inimaginable”, expuso. Resaltó que el Gobierno federal no es indiferente, que aunque es “un reto monumental” se enfrentará con todos los recursos que tiene el Estado.
“Sin las familias nunca”, expresó.
Es innegable la deuda que tiene el Estado mexicano ante la terrible situación que representa la desaparición de personas en el país, afirmó la titular de la Secretaría de Gobernación (SG), Olga Sánchez Cordero.
En la ceremonia de reinstalación del Sistema Nacional de Búsqueda de Personas, la funcionaria recordó que hace más de un año entró en vigor la Ley en materia de desapariciones y sin embargo no ha tenido los resultados esperados.
Y una de esas fallas, dijo, es que el Sistema Nacional de Búsqueda no ha operado eficazmente.
Indicó que a partir de esta reinstalación, el Sistema trabajará para convertirse en un instrumento de verdad y justicia, por lo que exhortó a los gobernadores de las 32 entidades federativas a trabajar de manera coordinada con esta instancia, así como a generar las condiciones para crear las comisiones locales de búsqueda de personas en los estados donde no se cuenta aún con ellas, y a reforzar las que ya existen.
El gobierno de Andrés Manuel López Obrador, dijo, trabajará de manera muy cercana con las familias de los miles de desaparecidos (40 mil de acuerdo con cifras oficiales), pues ha sido gracias a ellas que el tema sigue vigente y ahora se expresa el compromiso de la nueva administración federal para responder a esa severa crisis en materia de derechos humanos.
“Para el gobierno del presidente, para los gobernadores, la búsqueda de sus seres queridos es prioritaria. Nuestro gobierno no es indiferente, mientras nos sigan faltando (los desparecidos), México seguirá incompleto y la sociedad seguirá lejos de la justicia que tanto merece”.
Por su parte, la recién nombrada titular de la Comisión Nacional de Búsqueda (CNB), Karla Quintana Osuna, indicó que en México hay más de mil 300 fosas clandestinas, encontradas casi en su totalidad por mujeres, madres y esposas de esos miles de desaparecidos.
La desaparición va más allá de afectar únicamente a las víctimas. “Cuando una persona desaparece, desaparece la armonía social y familiar. Mientras no se sepa su paradero, la verdad de esos hechos y no se juzgue a los responsables, desaparece también la justicia”.
Edna Dolores Rosas Huerta, del colectivo Solecito de Veracruz y quien forma parte del consejo ciudadano del SNB, destacó que México vive una crisis de desaparición “de dimensiones incalculables”.
Por ello, celebró a nombre de las familias, la reinstalación del SNB y el compromiso del nuevo gobierno federal, el cual ha implementado “medidas novedosas” para llegar a la verdad y la justicia en estos crímenes, como la instalación de la Comisión Presidencial del caso Ayotzinapa.
(La Jornada)