CIUDAD DE MEXICO, 7 de junio (SinEmbargo).- El canciller mexicano Marcelo Ebrard Casaubón anunció esta noche detalles del acuerdo con Estados Unidos que elimina la aplicación de aranceles que pretendía Donald Trump. Dijo que México aceptó acelerar el control de su frontera sur, mientras que Estados Unidos compró el plan para desarrollar el sur y Centroamérica.
El acuerdo alcanzado incluye el envío de efectivos de la Guardia Nacional mexicana a su frontera sur y la recepción de migrantes en el país latinoamericano mientras aguardan por su proceso de asilo estadounidense, dijo el viernes el canciller mexicano, Marcelo Ebrard.
“Lo que se va a hacer es darle prioridad a los 11 municipios de la frontera sur, este despliegue (de la Guardia Nacional) empezará el día lunes”, dijo a la prensa Ebrard, quien calificó al acuerdo como “equilibrado”.
Agregó que para los migrantes que se encuentren en México habrá un programa para ofrecerles trabajo y proteger sus derechos humanos mientras concluyen su proceso de asilo en el vecino del norte.
El canciller mexicano afirmó que el gobierno de Estados Unidos respalda el plan de desarrollo integral para el sur de México y el triángulo norte de Centroamérica que impulsa el gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador.
A contrarreloj, negociadores estadounidenses y mexicanos negociaron desde el miércoles en Washington para evitar una guerra comercial que hubiera dañado a sus economías y asustado a inversionistas ya preocupados por las hostilidades entre Washington y Pekín.
Autoridades de ambos países dijeron que darán detalles del acuerdo en breve.
Durante la negociación, uno de los temas más álgidos fue la propuesta de Estados Unidos de que México sea declarado “tercer país seguro”, dijeron a Reuters dos fuentes mexicanas.
Esta propuesta supone que las personas que solicitan asilo en un país -en este caso Estados Unidos-, puedan recibir el mismo tipo de protección en otro país para aliviar los flujos migratorios.
La Guardia Nacional se desplegará en todo el territorio nacional, en especial de la frontera sur de México, y se atacará frontalmente la trata de personas, dijo Ebrard en un mensaje a medios. Explicó que ya hay un plan para ponerla en práctica principalmente en 11 municipios de la frontera sur; este lunes iniciará el despliegue.
Se estableció también que si las medidas que se están tomando no dan resultados se dará un plazo de 90 días para diseñar otras. Además, agradeció que EU respaldará el programa de desarrollo integral que les presentaron hace unos días.
“Todas las personas que atraviesan México deben registrarse”, resaltó y agregó “que quede claro, no somos solo un país para pasar de un lado a otro, somos productores de medidas alternas”.
El funcionario externó su alegría por el acuerdo y extendió su deseo de avances en Centroamérica. “Estamos satisfechos con el acuerdo, y si esto funciona, sobre todo el plan para Centroamérica, podemos encontrar una solución de fondo a estos problemas”, expuso.
El Canciller leyó ante los medios la declaración del acuerdo al que llegaron ambas naciones. “México y Estados Unidos se unieron esta semana para enfrentar los retos comunes en materia de migración”, recordó.
“Ambos países reconocieron la importancia fundamental de resolver rápidamente la emergencia humanitaria y la situación de seguridad prevalecientes”, dijo.
Detalló que se acordó en que “los Gobiernos de México y EU trabajarán conjuntamente lo más pronto posible para alcanzar una solución duradera a ese fenómeno”.
E indicó que como resultado de las discusiones, México y EU se comprometieron a las siguientes medidas:
Reforzamiento de las acciones para el cumplimiento de la Ley en México por parte de México. Con ello, precisó, “México incrementará significativamente su esfuerzo de aplicación de la Ley mexicana a fin de reducir la inmigración irregular”. Este compromiso incluye el despliegue de la Guardia Nacional en todo el territorio nacional, priorizando la frontera sur.
Ebrard anunció además que “México está tomando acciones decisivas para desmantelar las organizaciones de tráfico y trata de personas; así como sus redes de financiamiento y transporte ilegales”.
Señaló que ambas naciones también se comprometieron a fortalecer la relación bilateral, que incluye el intercambio de información y acciones coordinadas “a fin de proteger mejor y proteger la frontera común”.
Dijo que también Estados Unidos extenderá la instrumentación de la sección 235 a lo largo de su frontera sur, lo que implica que las personas que crucen la frontera de EU para solicitar asilo “serán retornados sin demora a México donde podrán esperar la resolución de sus solicitudes de asilo”.
Y México, precisó, “por razones humanitarias y en cumplimiento de acuerdo internacionales, autorizará la entrada de dichas personas mientras esperan la resolución de su solicitudes de asilo”.
“México de acuerdo con sus principios de justicia, fraternidad universal, ofrecerá oportunidades laborales y acceso a la salud y a la educación a los migrantes y a sus familias mientras permanezcan en territorio nacional, así como protección a sus derechos humanos”, afirmó el Canciller.
Oposición
Los aranceles hubieran puesto a Estados Unidos en una seria disputa comercial con su vecino del sur y China, dos de sus tres principales socios comerciales.
Grupos empresariales estadounidenses se opusieron a la escalada de las tensiones comerciales, advirtiendo que las tarifas hubieran elevado sus costos e implicarían precios más altos para los consumidores de ese país. Los aliados republicanos de Trump tampoco estaban interesados ??en aranceles.
Antes de la elección presidencial de Estados Unidos en el 2020, Trump está ansioso por mostrar avances en sus compromisos de la campaña del 2016, con una línea dura con respecto a la migración. Las detenciones en la frontera de Estados Unidos y México alcanzaron un máximo de una década en mayo.
El Gobierno de México asegura que la solución al problema migratorio es el desarrollo en El Salvador, Guatemala y Honduras, así como el Sur de México, de donde provienen la gran mayoría de migrantes.
Desde el miércoles, México parecía comprometerse con las exigencias de Estados Unidos luego de que anunció el reforzamiento de la seguridad en su frontera con Guatemala, aprehendió a dos de los principales organizadores de las caravanas de migrantes y bloqueó varias cuentas bancarias presuntamente relacionadas con el tráfico ilegal de migrantes.
Además, se comprometió a desplegar 6,000 efectivos de su recién creada Guardia Nacional en su frontera sur.