CIUDAD DE MEXICO, 2 de agosto (La Política Online).- La paz no duró, si alguna vez se pactó. Las pesquisas en contra de actores claves del priismo y, en particular, del sexenio pasado ahora son cartucho inservible para los opositores a la 4T que clamaban justicia no perdón ni amnistía. Emilio Lozoya, Carlos Romero Deschamps, Rosario Robles, Juan Collado son sólo la punta del iceberg que aún espera por más nombres con un proceso abierto.
Juan Manuel Flores Athié apenas duró mes y medio como responsable de la Unidad de Administración y Finanzas de la Secretaría de Gobernación, pese a permanecer durante la transición y aun cuando su protector político fue Manuel Mondragón, el primer Comisionado Nacional de Seguridad de Peña Nieto y exjefe de policía de Marcelo Ebrard.
De hecho, la propia Olga Sánchez Cordero explicó que de él dependieron “nuestros recortes” a la Segob, cuya reducción se estimó en 30%. Además, tuvo a su cargo negociar las peticiones del sindicato en ese momento. En funciones, proveniente del círculo cercano de Miguel Ángel Osorio Chong, hasta su renuncia no reveló su situación patrimonial.
En febrero, renunció sin mucho escándalo. Pero este martes trascendió que la Unidad de Inteligencia Financiera de la Secretaría de Hacienda que las cuentas bancarias de 10 empresas y siete personas, entre quienes figura el extitular de la Unidad de Administración y Finanzas de la Segob, fueron bloqueadas.
De acuerdo con el portal Capital CDMX, el medio vinculado a Miguel Ángel Mancera que filtró el número del expediente, Flores Athié ocupó espacios estratégicos en áreas que concentran licitaciones, contratos y administración de recursos en áreas de seguridad para el entonces jefe de Gobierno Marcelo Ebrard, o como director de Recursos Materiales de la extinta Secretaría de Seguridad Pública.
El caso adquiere su propia relevancia cuando se sabe quién es el objetivo final de la nueva investigación de Santiago Nieto: el senador Osorio Chong. El congelamiento de las cuentas de Flores Athié responde a dos acusaciones que ya están firmes. La primera sería triangulación de recursos a través de empresas fantasma y la segunda trataría sobre lavado de dinero.
“Era el hombre de las finanzas del senador. Él firmaba los cheques y verificó las cotizaciones. Recuerda que tesorero quiere decir el que guarda el tesoro. Hoy el tesoro más grande que guarda son los secretos financieros del priista, por ese botín va el doctor Nieto”, reveló un funcionario de Hacienda.