Las esculturas de la histórica tienda ubicada en el centro de la ciudad desaparecieron esta semana
Los caballos de bronce que se encontraban a la salida de la tienda La Palestina, ubicada en la calle 5 de mayo, casi esquina con Bolívar, en el Centro Histórico, fueron robados durante esta semana. El robo ocurrió a mitad de semana, días antes de que la jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum, y la esposa del Presidente, Beatriz Gutiérrez Müller, recorrieron calles del Centro Histórico para dar a conocer un programa con el que se intervinieron mil cortinas de negocios para crear una “galería urbana”.
“Es un esfuerzo importantísimo de la Cuarta Transformación del gobierno de México, de recuperación y rescate de la memoria histórica”, dijo la jefa de Gobierno durante el recorrido que realizaron en tranvía y que incluyó la calle de Bolívar, donde se localiza La Palestina. Dependientes de la talabartería fundada en 1884 indicaron a EL UNIVERSAL que tras el robo dieron aviso a las autoridades del Banco de México, responsables del inmueble en donde se encuentra la tienda, para que realizara la denuncia correspondiente y se resguardaran las piezas que no lograron robarse.
Al cierre de esta edición no se obtuvo información del Banco de México ni de cuántas piezas se conservaron; por ahora, todas fueron retiraras, al igual que el barandal.
De acuerdo con la Guía de comercios centenarios del Centro Histórico, publicada en 2011 por el Fideicomiso Centro Histórico, la Autoridad del Centro Histórico y la revista Ritos y Retos del Centro Histórico, este negocio —cuya especialidad es vender productos de piel— registra en su historia, además de haber sido visitada por dos de los caudillos revolucionarios mexicanos más importantes, Emiliano Zapata y Francisco Villa, el conservar en su fachada el único testimonio que da fe de la importancia que tenían los caballos como transporte en otros tiempos.
“Es un hermoso barandal de bronce decorado con cabezas y patas de caballos, que a su vez tienen forma de hipocampo y que sirvieron en su momento para amarrar los caballos mientras sus dueños entraban a comprar sus sillas de montar, cinturones, espuelas, fuetes y todos aquellos artículos necesarios para el arte de la charrería o cuando tenían que acudir a alguna diligencia en esa zona de la ciudad, como fue el caso de Zapata y Villa que, se dice, dejaron amarrados sus caballos mientras se reunían a discutir importantes temas relacionados con causas agrarias y populares en Palacio Nacional.
‘Esos barandales son los originales donde Emiliano Zapata y Pancho Villa llegaron a amarrar sus caballos’, cuenta Bernardo Montiel, uno de los dueños de la tienda”. En el libro Centro Histórico. 200 lugares imprescindibles, de Héctor de Mauleón y Rafael Pérez Gay, se detalla que La Palestina fue el primer edificio de seis pisos que hubo en la Ciudad de México. (El Universal)