LA HABANA, Cuba, 16 de marzo (Por Pelayo Terry Cuervo, especial para Por Esto!).- Cuba abrió sus puertas al crucero británico MS Braemar, varado en el Caribe con varios casos de coronavirus confirmados, porque “son tiempos de solidaridad, de entender la salud como un derecho humano”, señaló este lunes, en una Declaración, el Ministerio de Relaciones Exteriores del archipiélago.
De acuerdo con el comunicado “el pasado 13 de marzo el gobierno del Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda del Norte solicitó a las autoridades cubanas el permiso de atraque en un puerto cubano del crucero MS Braemar, de la línea Fred Olsen, con un pequeño número de viajeros afectados por el nuevo coronavirus (SARS CoV 2/COVID-19), y su repatriación por vía aérea”.
Ante la urgencia de la situación y el riesgo para la vida de las personas enfermas, “el gobierno de Cuba ha decidido permitir el atraque de esta embarcación y adoptará las medidas sanitarias establecidas para recibir a todos los ciudadanos a bordo, bajo los protocolos establecidos por la Organización Mundial de la Salud (OMS) y el Ministerio de Salud Pública de Cuba”, agrega la nota, en la cual se precisa que de conjunto con las autoridades británicas, “se ha organizado que una vez que los cruceristas arriben a territorio nacional, se proceda al retorno seguro e inmediato de estos viajeros al Reino Unido en vuelos charter de compañías aéreas a ese país”.
El Ministerio de Relaciones Exteriores de Cuba manifiesta que “son tiempos de solidaridad, de entender la salud como un derecho humano, de reforzar la cooperación internacional para hacer frente a nuestros desafíos comunes, valores que son inherentes a la práctica humanista de la Revolución y de nuestro pueblo”, concluye.
En medio de esa compleja situación que vive el planeta con la extensión de la pandemia, la mayor de las Antillas dio otra muestra de su solidaridad, al enviar a Venezuela varios médicos cubanos de la brigada Henry Reeve para situaciones de desastres, con el propósito de ayudar a combatir la enfermedad, de la cual el país sudamericano tiene una veintena de enfermos y han declarado en cuarentena al menos a siete estados.
La delegación técnica especializada llegó en la noche del domingo a Caracas para apoyar la estrategia de contención de la COVID-19 y de acuerdo con José Ernesto Betancourt Lavastida, director de Defensa y Defensa Civil del Ministerio de Salud Pública (Minsap), de conjunto con la Brigada Médica Cubana, el grupo valorará cómo puede ser mejor la protección del pueblo venezolano, la preparación de las instituciones y la comunicación social de riesgo sobre esta enfermedad.
No es más que el resultado de la actuación rápida del presidente Maduro y la hermandad del pueblo y gobierno cubano y el convenio de Salud Cuba-Venezuela que fue firmado por dos grandes líderes: Fidel Castro y Hugo Chávez. Esto es resultado de la hermosa alianza Cuba-Venezuela, precisó.
Dos especialistas de medicina intensiva, un epidemiólogo y un microbiólogo-virólogo del Instituto de Medicina Tropical Pedro Kourí llegaron a la nación sudamericana, donde también se encuentra el Dr. Luis Herrera, director fundador del Centro de Ingeniería Genética y Biotecnología de La Habana, quien evalúa la pertinencia y las posibilidades de empleo de los medicamentos cubanos en interés del combate a esta enfermedad.
Paralelamente a estas acciones solidarias, las autoridades cubanas no detienen el ritmo de las medidas para contrarrestar la COVID-19, y ya en La Habana inició la desinfección de todos los ómnibus de transporte público urbano, con soluciones de cloro en los pasamanos, asientos, puertas y otras superficies de esos vehículos, que mueven diariamente a más de un millón de personas, según fuentes oficiales.
Las medidas puestas en práctica también incluyen la higienización de las bases, talleres y centros laborales del sector y a la llegada de cada trabajador.
También se conoció que un estudiante de la Universidad Tecnológica de La Habana (CUJAE), que se encontraba bajo vigilancia, luego de dos pruebas seguidas dio negativo a la COVID-19, con lo cual se desmintió la existencia de un brote de la enfermedad en ese centro de altos estudios.