CIUDAD DE MÉXICO, 8 de abril (SinEmbargo/Apro).– El doctor Hugo López- Gatell Ramírez reconoció la noche de este miércoles que los datos del COVID-19 que se presentan todos los días en México son solamente un muestreo y no el total ni de infectados ni de muertos. Después de los cuestionamientos que se le han hecho a partir de que revelara al jefe del buró en México de The Economist, el subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud debió explicar hoy qué es el “modelo centinela”.
Es básicamente, dijo, “como una encuesta”, un muestreo. Sirve para efectos de seguimiento del COVID-19, pero no es el dato puntual como se lo dan otros países, y que permite además que México sea ranqueado, como ejemplo, en el mapa de la Universidad Johns Hopkins.
Las estimaciones, basadas en el modelo de vigilancia centinela arrojan más de 26 mil posibles casos de COVID-19 en México, reconoció el funcionario en conferencia desde el Palacio Nacional.
“Nosotros estimamos 26 mil casos. Entonces alguien podría decir: ustedes son mucho más que varios países latinoamericanos que tienen mil y tantos. No, nosotros reconocemos explícitamente que tenemos 26 mil. En cualquier otro país que tengan solamente los casos observados, también hay que corregir y multiplicarle por un número, no necesariamente idéntico, que el de México, pero un número parecido, 10, 12 casos no observados por cada uno”.
Dijo que en los países donde se han tenido enorme epidemias, también se tendría que multiplicar esos casos por un factor semejante. Explicó que un país que hoy tuviera 300 mil casos, observados y demostrados por laboratorio, con un factor de corrección “tendría 3 millones de casos”.
“Lo que estamos observando representa 10 o 12 veces más, esa es la interpretación”, dijo.
“Las personas que pueden ser directamente observadas son 3 mil y tantas, pero cada una de ellas representa a otros 12, vamos a redondearlo, que no fueron a consulta, que no tenían síntomas al momento de la consulta, que su médico no identificó que cumplían la definición de caso, etcétera”, añadió.
Más adelante, ante la insistencia de la prensa, reconoció que “de lo que se ve, la epidemia es ocho veces más grande”.
Dijo que en fase 1, el país tiene una situación manejable, pero recordó que llegará un momento en el que sean tantos casos “que no habría manera, ni tendría sentido poner en aislamiento a cada uno de ellos”. Por eso el llamado de quedarse en casa es general, insistió.
El método polémico
El doctor Hugo López-Gatell explicó esta noche que las personas no están llegando a las salas de espera ni a las consultas, y están haciendo caso de que, “si no tienen comorbilidades o son mujeres embarazadas, lo más probable es que, si se quedan en casa, se recuperarán en 14 días”.
“Entre que una persona tiene síntomas y se complica la enfermedad, pasa cierto número de días para que ocurra la muerte. ¿Cuántos días? La mitad de las defunciones ocurrieron en nueve días”, expuso.
“No hay manera de parar la epidemia, sólo se puede reducir si nos quedamos en casa. México utiliza un método de vigilancia probado, que fue desarrollado por centros de control de enfermedades de Estados Unidos y la Organización Mundial de la Salud en 2015”, añadió.
Pero sobre el polémico método que México está usando, el vocero del Gobierno federal para el tema del COVID-19 dijo: “El método nos permite tener un conocimiento de lo que queremos saber; es decir, saber cómo se comporta la epidemia en México”.
En cuanto al uso de túneles sanitizantes, López-Gatell explicó que estos podrían traer más contagios.
“Si suponemos que una persona tiene COVID-19 y que su vía respiratoria está sacando virus lo que va a ocurrir es que conforme la persona respira esas partículas de virus se van a estar movilizando”, indicó.
“Puede ser que la persona pase muy poquito tiempo, salgan los aerosoles y que no sea suficiente para inactivar el virus y tenemos el efecto opuesto: riesgo de propagación de infecciones. Por eso decimos, no, las cosas tienen un porqué, una técnica”, agregó.
El funcionario recordó que los túneles comenzaron a aparecer incluso en hospitales federales en la Ciudad de México y en algunas plazas públicas, así como en la zona sur y norte del país. “Si no fueran un riesgo no hubiéramos dicho nada, solo hubiéramos dicho: ‘se está desperdiciando el dinero’, pero sí tienen un riesgo”, reiteró.
La Secretaría de Salud alertó que dichas tecnologías podrían “generar una falsa sensación de seguridad de las personas” e invitarlas a descuidar medidas básicas de prevención como el lavado frecuente de manos.
López-Gatell pide a jóvenes no confiarse
Los jóvenes no deben confiarse porque también se pueden contagiar de covid-19 si padecen una enfermedad crónica de la que no tenían conocimiento, advirtió el subsecretario Hugo López-Gatell.
En un video publicado en su cuenta de Twitter, el funcionario alertó que en México hay una de las más altas frecuencias de diabetes del mundo, que lleva a que haya jóvenes que tengan papá o mamá o tías que padecen esa enfermedad.
“Y ellos (los jóvenes) tienen mayor posibilidad de tener diabetes aun cuando no lo sepan”, afirmó el subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud.
Destacó que a veces este tipo de infecciones graves son las que llevan a descubrir que tienen diabetes, “pero en este caso podría ser cuando es demasiado tarde porque se han complicado”.
Es una epidemia seria, no se lo tomen a la ligera, pidió a los jóvenes.
De nada sirve que la vida se acabe por un acto de sobreconfianza, aseveró, y reiteró su recomendación de quedarse en casa. “Ya habrá momento para disfrutar la vida cuando haya pasado el peligro”, concluyó.