Ante los efectos en la economía que tendrá la pandemia de coronavirus COVID-19, 31 por ciento de las empresas en México tendrán que despedir personal y al menos 6 de cada 10 unidades productivas prevé que se cancelarán o se aplazarán inversiones, de acuerdo con la consultora PWC. Según la tercera edición de su encuesta sobre el pulso de los directores de finanzas de las empresas ante los efectos de COVID-19, la expectativa sobre despidos y menos inversiones tuvo una ligera mejora respecto de abril. En tanto, la firma informó que 91 por ciento de las empresas estima una mayor contención de gastos y 31 por ciento estima un cambio en los planes de financiamiento. En cuanto a la modificación de los planes de inversión, los líderes financieros aseguran que las más afectadas serán las relativas a la infraestructura, las operaciones, la fuerza laboral y las tecnologías de la información. PWC explicó que 81 por ciento de las empresas consideran que la actual crisis podría mejorar la resiliencia y la agilidad de los negocios. A la par, 71 por ciento considera que flexibilizará las condiciones laborales, en aspectos como el horario o la localización geográfica de los trabajadores, al tiempo que creará nuevas formas de servir a los clientes y eficientará las operaciones. "Tal y como aseguran los líderes de finanzas, el COVID-19 supondrá un antes y un después en la forma en la que concebimos el trabajo en la actualidad. El trabajo remoto y los horarios flexibles han llegado para quedarse, mientras que las compañías deben convertirse en entidades más flexibles y ágiles si quieren ser capaces de enfrentar y salir fortalecidas de la crisis", explicó PWC. Para los directores de finanzas de las empresas en el país, al regreso a los centros de trabajo, se deberán implementar cambios enfocados, no solo a garantizar un entorno de trabajo seguro sino que también tendrán que diseñar estrategias que permitan retener al talento crítico y gestionar temas relativos al bienestar y la moral de la fuerza laboral así como conocer cuáles son las perspectivas de los consumidores en materia de seguridad. "Los plazos manejados para la vuelta a la normalidad se acortan. La mayoría de los encuestados considera que, de solucionarse hoy la crisis, su compañía tardaría entre 3 y 6 meses en recuperarse (33 por ciento). A finales del mes de abril, 36 por ciento consideraba que este esfuerzo tomaría entre 6 a 12 meses", explicó.
Con información de El Universal
Por Redacción Digital Por Esto!
AE