Lo que para una alta tasa de la población en el mundo ha significado la muerte debido a la COVID-19, para funcionarios de la cuatroté, sólo ha significado algunos días en casa, después de la serie de cuidados que la enfermedad requiere para recuperarse de ella.
Cuando en México durante las últimas horas se reportan un total de 4,482 casos nuevos y 276 muertes, el librar una batalla de tal nivel implica cuidados especiales, sobretodo cuando el país ha tomado la cuarta posición en mayor número de muertes, incluso por arriba de Italia, ello conforme a datos e información provista por la Universidad Johns Hopkins.
Cabe mencionar que entre los funcionarios más destacados de la administración actual que han contraído el virus y lo han superado se encuentran: la secretaría de la Función Pública (SFP), Irma Eréndira Sandoval, quien dio positivo en abril; Ricardo Sheffield, titular de la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco), en mayo; Zoé Robledo, director del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), en junio; Arturo Herrera, también al cierre de junio.
Este último funcionario recién retomó sus actividades el 13 de julio tras superar al coronavirus; fue el pasado fin de semana que, tras realizarse la prueba de COVID-19 salió negativo y, conforme a recomendaciones médicas pudo tomar su junta de trabajo semanal que sostiene con su equipo más cercano.
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