Luego de que Edmundo Jacobo Molina anunciara la renuncia a su cargo en la Secretaría Ejecutiva del Instituto Nacional Electoral (INE), el presidente Andrés Manuel López Obrador acusó que el funcionario mexicano se llevará como finiquito más de 10 millones de pesos tras dejar su puesto el próximo 3 de abril.
“Un porfirito se va a llevar también más de 10 millones. Cualquier ciudadano, un trabajador si es despedido se le liquida, se le dan 3 meses de sueldo, más 20 días de acuerdo a los años trabajados, así lo establece la ley. Aquí no sólo es eso, es más, es con el fondo de ahorro como se mantienen estos privilegios”, explicó el presidente.
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Agregó que durante los 15 años de cargo de Edmundo Jacobo en el INE, el gobierno de México aportó a cantidades iguales en el fondo de ahorro para su liquidación. Detalló que México gasta más de 25 mil millones de pesos en materia electoral al año. Y que son este tipo de privilegios los que se buscan frenar con el Plan B del INE.
Por otra parte, el presidente López Obrador se declaró a favor de que los cuatro relevos en el INE sean elegidos a través de un sorteo y no por acuerdos entre las fracciones partidistas quienes históricamente se repartían los cargos entre ellos.
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“Mi opinión es de que no se negocie, que no haya cuota y que sea la fortuna, diría Maquiavelo. Desde luego, yo no soy legislador, soy titular del Ejecutivo, pero sería muy bueno que no se llevara a cabo un enjuague y hasta sacaban los acuerdos por unanimidad, ojalá sea de esa manera”, precisó.
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