Celebrar el Año Nuevo con el tradicional consumo de uvas será un lujo para muchas familias mexicanas en 2025, ya que el precio de esta fruta se disparó hasta los 200 pesos por kilo, según un sondeo realizado en diversos mercados.
Este incremento representa un alza de aproximadamente 100 por ciento en comparación con los 100 pesos por kilo de la uva verde durante el 2023.
Por su parte, la uva roja sin semilla, considerada una opción más accesible, oscila entre 80 y 100 pesos por kilo, reflejando un incremento promedio del 60 por ciento respecto al año anterior.
Factores detrás del aumento
De acuerdo con vendedores de frutas y verduras, las condiciones climáticas afectaron gravemente los cultivos de uvas en estados clave como Zacatecas, Aguascalientes y Sonora, principales productores de esta fruta.
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La combinación de sequías prolongadas y lluvias intensas redujo la oferta, lo que, junto con la alta demanda típica de las fiestas decembrinas, disparó los precios.
“Hay poca uva verde sin semilla, por eso está tan cara. En cambio, la roja es más accesible, aunque los clientes aún se sorprenden por los precios”, comentan.
Preferencias y estrategias de los consumidores
Ante estos precios elevados, muchos compradores optan por la uva roja sin semilla debido a su menor costo. Sin embargo, las ventas han disminuido, ya que algunas familias eligen cantidades menores para repartir entre los asistentes al brindis.
Alternativas en supermercados
Los precios en supermercados ofrecen opciones ligeramente más económicas. Por ejemplo:
- Soriana: Uva verde, 110 pesos el kilo; uva roja, entre 84 y 99 pesos el kilo.
- Walmart y Bodega Aurrerá: Caja de 900 gramos de uvas rojas o verdes en 79 pesos.
- Chedraui: Uva roja y verde a 89 pesos el kilo; uva negra a 153 pesos el kilo.
A pesar del impacto en el bolsillo, la tradición de las 12 uvas persiste, y los consumidores buscan alternativas para mantener vivo este ritual que simboliza esperanza y prosperidad en el Año Nuevo.
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