El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, señaló este jueves que la huelga en la planta de Audi en Puebla, que estalló la semana pasada debido a desacuerdos sobre el incremento salarial, está cerca de resolverse.
La planta, ubicada en San José Chiapa, es reconocida como la primera fábrica premium de Audi en América y es operada por el Sindicato Auténtico de Trabajadores de la Empresa Audi México (Sautam) y el Sindicato Independiente de Trabajadores de Audi (Sitaudi).
El paro laboral, iniciado el 24 de enero, ha impactado la producción, deteniendo la fabricación de más de 700 vehículos diarios.
El conflicto surge debido a que la empresa ofreció un aumento salarial del 6.5 por ciento, cifra que queda corta frente al 15.5 por ciento solicitado por los trabajadores.
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López Obrador indicó que la Secretaría del Trabajo está interviniendo como mediadora en el conflicto.
"Creo que se llegará a un acuerdo entre el sindicato y la empresa. Es el único caso que tenemos sobre un paro o huelga empresarial", comentó el mandatario mexicano.
Este paro laboral en la industria automotriz tiene una relevancia particular, ya que el sector representa alrededor del 4 por ciento del PIB de México y el 20.5 por ciento del PIB manufacturero, siendo uno de los más significativos en la economía nacional, de acuerdo con datos de la Asociación Mexicana de la Industria Automotriz (AMIA).
La huelga de Audi refleja los cambios en el panorama laboral mexicano tras las reformas que promovieron una mayor democracia sindical, en línea con los compromisos adquiridos en el Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC), que entró en vigor en 2020.
"Esto es parte de la democracia y la libertad. Es un derecho de los trabajadores, el derecho a la huelga", enfatizó el presidente López Obrador.
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