En la conmemoración del 76° aniversario de la Nakba, el Gobierno de México ha reiterado su solidaridad hacia el pueblo de Palestina, haciendo un llamado enfático al cese inmediato de las hostilidades en la Franja de Gaza y a la reanudación plena de los flujos de ayuda humanitaria para aliviar el sufrimiento de los civiles inocentes.
Este llamado busca también impulsar el proceso hacia la creación de dos Estados independientes.
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México condena asalto militar en Rafah y llama a cese al fuego humanitario urgente
Recordando su propio origen como nación que luchó por los ideales de igualdad, libertad y justicia, México destaca que estos principios son ahora los pilares de su política exterior, dirigidos a defender su soberanía, integridad territorial e intereses nacionales.
En el aniversario de la Nakba, evento que marcó el éxodo de más de 700 mil personas durante la guerra árabe-israelí de 1948, México se une a la voz de los palestinos recordando su difícil historia y apoyando su derecho a la autodeterminación.
México enfatiza que la autodeterminación de los pueblos, la resolución pacífica de conflictos y el respeto al derecho internacional y la integridad territorial son fundamentales para la coexistencia armónica entre las naciones y son esenciales para lograr una paz duradera.
Ante el recrudecimiento de la violencia, el Gobierno de México ha condenado la situación en Gaza como inaceptable y ha defendido los derechos políticos, sociales y territoriales de los palestinos en diversos foros internacionales.
A lo largo de su participación en debates multilaterales, regionales y bilaterales, México ha instado repetidamente al Consejo de Seguridad de la ONU a tomar medidas frente a las continuas violaciones del derecho internacional en los territorios palestinos.
México, compartiendo experiencias similares de separación y exclusión por muros y fronteras, se solidariza profundamente con el pueblo palestino.
Junto con la mayoría de los Estados miembros de las Naciones Unidas, México promueve un diálogo global que favorezca el reconocimiento de Palestina como Estado miembro de la ONU, un paso crucial hacia la solución de dos Estados.
México mantiene la esperanza de que, al igual que en el pasado, diferentes pueblos y confesiones puedan coexistir pacíficamente en el Mediterráneo oriental, y sigue comprometido con la visión de restaurar la paz y la armonía en la región.
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