El presidente Andrés Manuel López Obrador afirmó que la estrategia de nearshoring en América del Norte fue una iniciativa propuesta por México en respuesta al crecimiento económico de China y las políticas de aislamiento de Estados Unidos durante la administración de Donald Trump.
Durante su conferencia mañanera, López Obrador explicó que la idea de nearshoring surgió como una respuesta a la concentración del mercado internacional en China, que amenazaba con dejar a América del Norte limitada y dependiente.
"Se aceptó la propuesta de México, nada más que ahora le llaman de otra forma en inglés. Ya ven cómo se ponen de moda esos términos. Le llaman nearshoring. Bueno, eso es una propuesta de México. Fuimos nosotros los que lo propusimos, le pusieron el nombre", afirmó el mandatario.
Dificultades para convencer a Estados Unidos
El presidente reconoció que no fue fácil convencer a Estados Unidos de la importancia de equilibrar y fortalecer económicamente a América del Norte. "Nos costó trabajo que entendieran por qué se requiere el equilibrio, por qué es importante el fortalecimiento económico de América del Norte y de toda América", señaló López Obrador.
El mandatario también destacó el papel de México en la integración de Canadá al acuerdo comercial de América del Norte. Según el mandatario, México intervino para mantener el tratado original entre los tres países, a pesar de que inicialmente Estados Unidos proponía un acuerdo bilateral con México.
"Al final nos hicieron caso, porque el Presidente Trump tuvo esa visión y se integró Canadá. Había diferencias entre Estados Unidos y Canadá. Nosotros ayudamos para que se suscribiera el convenio entre los tres países", afirmó.
Impacto del nearshoring en la industria de semiconductores
El presidente subrayó que la estrategia de nearshoring ya está dando frutos, con plantas de fabricación de semiconductores y chips trasladándose a Arizona desde Asia. Esto abre nuevas posibilidades de crecimiento para el estado de Sonora y el Plan Sonora, gracias a la integración económica en América del Norte.
López Obrador también propuso una integración económica y comercial en toda América a mediano y largo plazo, similar a la Comunidad Europea que se convirtió en la Unión Europea. Según el presidente, esta integración convertiría al continente americano en una región muy fuerte, con abundantes recursos naturales, tecnología y una fuerza de trabajo joven que seguirá siendo clave a pesar del avance de la robótica, la automatización y la inteligencia artificial.
El mandatario mexicano destacó las buenas relaciones con el gobierno de Estados Unidos y la importancia de garantizar el respeto a la independencia y soberanía de México. Además, mencionó los beneficios de la integración económica, como la fabricación de vehículos en México para el mercado estadounidense, lo que reduce los costos para los consumidores en Estados Unidos.
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