Septiembre es conocido como uno de los meses más sísmicos en México, quen los geólogos señalan que esa aseveración es errónea. Sin embargo, eventos como el sismo del 19 de septiembre de 1985 y el del mismo día en 2017 han dejado una huella importante en la memoria colectiva del país.
Aunque los sismos no se pueden predecir, sí es posible prepararse para minimizar los daños y proteger tanto a tu hogar como a tu familia. A continuación te presentamos consejos prácticos para estar listo durante esta temporada, en la que se percibe una mayor actividad sísmica.
¿Por qué septiembre es un mes sísmico en México?
México está ubicado en una zona altamente sísmica debido a su localización sobre el Cinturón de Fuego del Pacífico, donde convergen varias placas tectónicas, como la placa de Cocos, la placa Norteamericana y la placa del Pacífico. Esta situación genera un alto número de temblores, especialmente en la costa del Pacífico y en el centro del país. A lo largo de los años, los sismos en México han sido más notorios en septiembre, en particular el 19 de septiembre, que ha visto grandes terremotos.
Y para estar preparado ante estos eventos, te compartimos la siguientes recomendaciones:
1. Inspecciona la estructura de tu vivienda
El primer paso para proteger tu hogar es realizar una inspección estructural. Si vives en una zona sísmica, es importante contar con un arquitecto o ingeniero que evalúe la resistencia de la estructura. Se debe verificar que las columnas y paredes de carga estén en buen estado, que no haya grietas profundas y que el diseño general del edificio cumpla con las normas actuales para sismos en México.
Si es necesario, refuerza los puntos más vulnerables de la vivienda. Asegurarse de que tu hogar está preparado para resistir un temblor reducirá significativamente el riesgo de colapso o daños severos durante un terremoto.
2. Asegura los muebles y electrodomésticos
Durante un sismo, los objetos pesados y altos, como libreros, estanterías y electrodomésticos, pueden caer y causar daños o lesiones. Es recomendable fijar estos elementos a las paredes con soportes adecuados. Además, los muebles más pesados deben colocarse en los pisos bajos para evitar que se vuelquen fácilmente durante un movimiento sísmico.
Los electrodomésticos grandes, como refrigeradores o estufas, también deben estar firmemente sujetos a las paredes o al suelo. El uso de correas de seguridad es una opción efectiva para evitar que se desplacen.
3. Prepara una mochila de emergencia
Contar con una mochila de emergencia es una de las medidas más importantes en caso de un terremoto. Debe estar al alcance y contener artículos esenciales como:
- Agua potable.
- Alimentos no perecederos.
- Linterna y baterías adicionales.
- Un botiquín de primeros auxilios.
- Cargadores portátiles.
- Ropa de abrigo y cobijas.
- Documentos importantes en una bolsa impermeable.
Esta mochila debe estar lista en todo momento, porque nunca sabes cuando puede presentarse un sismo.
4. Establece un plan familiar
Es fundamental que tu familia esté preparada y sepa cómo actuar en caso de sismos o temblores en México. Define rutas de evacuación seguras dentro de tu hogar y establece puntos de reunión fuera de la casa. Además, ensaya simulacros regularmente para que todos los miembros de la familia conozcan los pasos a seguir.
En estos simulacros, practica cómo evacuar sin pánico y cómo protegerse en caso de que no sea posible salir. Recuerda el principio de “agacharse, cubrirse y agarrarse” para minimizar el riesgo de lesiones durante un terremoto.
5. Mantén despejadas las áreas de salida
Es importante mantener despejadas las rutas de evacuación y salidas de emergencia en todo momento. Las puertas, pasillos y escaleras deben estar libres de obstáculos como muebles o cajas que puedan dificultar el escape durante un terremoto. Esto es vital, ya que en un momento de emergencia, la rapidez y facilidad para evacuar pueden marcar la diferencia.
6. Apaga el gas y la electricidad
Uno de los mayores riesgos durante un terremoto es la posibilidad de fugas de gas o incendios. Después de un sismo, si es seguro hacerlo, cierra el suministro de gas y desconecta la electricidad para evitar situaciones de peligro. Asegúrate de que todos en casa sepan cómo hacerlo y tengan acceso fácil a las llaves de corte.
7. Refuerza puertas y ventanas
Las puertas y ventanas también son puntos vulnerables durante un terremoto. Instala vidrios templados o laminados que sean menos propensos a romperse en caso de un temblor. En cuanto a las puertas, asegúrate de que estén bien ancladas a las paredes y que los marcos sean sólidos.
8. Protege las tuberías y sistemas de agua
Las tuberías de gas y agua pueden sufrir daños graves durante un sismo. Asegúrate de que estén correctamente instaladas y protegidas con soportes flexibles que permitan un movimiento seguro sin romperse. Las fugas de agua también pueden provocar inundaciones dentro de la casa, lo que sumaría otro problema tras un terremoto.
9. Considera un seguro contra terremotos
Otra forma de proteger tu hogar es contratando un seguro contra terremotos. Esto es especialmente relevante si vives en zonas con alta actividad sísmica, como la Ciudad de México o la costa del Pacífico. Un seguro puede ayudar a cubrir los costos de reparación de los daños ocasionados por los temblores en México.
10. Mantente informado
Finalmente, es fundamental mantenerse informado sobre los protocolos de seguridad ante sismos en México. Participa en simulacros y sigue las recomendaciones oficiales. Instala aplicaciones en tu teléfono que te avisen sobre la actividad sísmica y asegúrate de que todos en casa conozcan los números de emergencia.
IO
