Los aranceles son impuestos aplicados a productos importados o exportados con el objetivo de regular el comercio exterior, proteger industrias nacionales y generar ingresos para el gobierno. Existen tres tipos principales:
- Ad-valorem: Se calculan como un porcentaje del valor del producto.
- Específicos: Se fijan como una cantidad monetaria por unidad de medida, como peso o volumen.
- Mixtos: Combinan ambas modalidades.
En el contexto del Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC), la reciente propuesta del presidente estadounidense Donald Trump de imponer un arancel del 25 por ciento a las exportaciones mexicanas ha generado incertidumbre en los sectores productivos y la economía de América del Norte.
Diferencia entre arancel e impuesto
Aunque suelen confundirse, los aranceles y los impuestos tienen diferencias clave:
- Aranceles: Se aplican en el comercio exterior y regulan la entrada y salida de productos entre países.
- Impuestos: Abarcan diversas transacciones económicas internas, como el IVA o el ISR en México.
Los aranceles propuestos por Trump funcionarían como barreras comerciales, encareciendo los productos mexicanos y reduciendo su competitividad en el mercado estadounidense.
Sectores más afectados por los aranceles de Trump
Si se aplicaran los aranceles a los productos mexicanos, los sectores más perjudicados serían:
- Automotriz: México es uno de los principales exportadores de vehículos y autopartes a Estados Unidos.
- Agrícola: Productos como aguacates, berries y tomates, que dominan el mercado estadounidense, tendrían un incremento en sus costos.
- Manufactura: Bienes electrónicos y electrodomésticos, como televisores y lavadoras, perderían competitividad frente a otros países.
Estos aranceles podrían alterar las cadenas de suministro integradas entre los tres países del T-MEC, afectando no solo a empresas mexicanas, sino también a compañías estadounidenses que dependen de insumos de México.
Aranceles aplicados por México
México también utiliza aranceles como herramienta de política comercial. Actualmente, las tarifas de importación en el país oscilan entre 0 por ciento y 35 por ciento, dependiendo del tipo de producto y su origen.
Gracias al T-MEC, muchos aranceles han sido eliminados o reducidos para facilitar el intercambio comercial entre los países firmantes. Sin embargo, si Estados Unidos impone nuevos aranceles a México, el gobierno mexicano podría tomar represalias comerciales, aumentando sus propias tarifas a productos estadounidenses.
Impacto en el T-MEC y el comercio bilateral
El T-MEC establece mecanismos para evitar el uso arbitrario de aranceles entre sus miembros. La imposición unilateral de estos gravámenes por parte de Estados Unidos podría generar conflictos legales dentro del tratado.
Además, el impacto no solo afectaría a México, sino también a empresas estadounidenses que dependen de insumos y productos manufacturados en México, lo que podría provocar un aumento en los precios al consumidor en Estados Unidos.
De tal manera que los aranceles son herramientas que pueden beneficiar o afectar el comercio internacional.
La intención de Donald Trump de imponer un 25% de aranceles a las exportaciones mexicanas representaría un riesgo para la economía de la región, especialmente para sectores estratégicos como el automotriz, agrícola y manufacturero.
Ante este escenario, la colaboración entre México, Estados Unidos y Canadá será clave para mantener la estabilidad comercial en América del Norte y evitar un conflicto que afecte a las economías de los tres países.
IO