La construcción del Tren Maya abarca un trazo de aproximadamente mil 500 kilómetros que pasarán por los estados de Chiapas, Tabasco, Campeche, Yucatán y Quintana Roo. Parte de esta ruta atravesará la selva maya del Sureste de México.
Por ello, autoridades involucradas en el proyecto han predispuesto medidas pertinentes para proteger el ecosistema de esta región, principalmente a la fauna que en ella habita.
“El proyecto trabaja de la mano con más de 100 especialistas y académicos en manejo ecológico de proyectos de infraestructura y con el apoyo de universidades y centros de investigación de la región, así como con dependencias del Gobierno de México como la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (SEMARNAT)”, se lee en el sitio web del Tren Maya.
El Fondo Nacional de Fomento al Turismo (Fonatur) explicó que, entre estas medidas para proteger la biodiversidad de la selva maya, se contempla la construcción de pasos de fauna para evitar la fragmentación del ecosistema y la reintegración de las especies locales a su hábitat.
Se trata de pasos subterráneos o elevados acondicionados con vegetación y otros elementos que garanticen su uso, dependiendo la zona y la fauna a preservar. Además, se mantendrá un monitoreo constante de las mismas.
Sobre la cantidad y ubicación de estos pasos de fauna, expresaron que estos serán construidos “con base en las investigaciones del equipo de expertos consultado por Fonatur”.
De igual forma, se están utilizando estrategias como el fototrampeo, una forma no invasiva de registrar a las diferentes especies que habitan un ecosistema, para reconocer cuáles son las ubicaciones ideales para la construcción de esta infraestructura.
Entre las especies que habitan la selva maya se encuentran el jaguar, el tapir, el pavo ocelado, el mono aullador negro, entre otros.
Precisaron que para los primeros tres tramos del tren se tienen contemplados al menos 40 pasos de fauna.
Con información de Tren Maya.gob.mx y Selva Maya.info
LAF