La Secretaría de Cultura del Gobierno de México, a través del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), informó que los trabajos de salvamento arqueológico, que tentativamente iniciarán a principios del mes de septiembre, garantizarán que no se afecten los vestigios e información arqueológica mediante exploraciones controladas que tienen por objetivo avanzar en el conocimiento de las sociedades pretéritas en las distintas regiones por donde cruza la ruta, mediante una investigación de salvamento arqueológico.
A través de un comunicado, señaló que ya se trabaja en el Tramo I, donde se ubica el sitio Aguada Fénix y se han hecho interpretaciones de la prospección, a fin de adelantar procesos y hacer del conocimiento de Fondo Nacional de Fomento al Turismo (Fonatur) los puntos críticos con alta presencia de vestigios arqueológicos, mismos que se encontraban en proceso de valoración, pero que ya pasarán a actividades de salvamento.
Destaca que por ley, el INAH determinará, metro por metro, la factibilidad del proyecto, por lo que respecta que trazo de la ruta original no se verá afectada por el momento, por lo que Fonatur no ha contemplado la desviación de la ruta del Tren Maya.
Cabe señalar que los primeros resultados de la prospección Lidar, llevada a cabo mediante un convenio con el Fonatur, se han hecho las interpretaciones correspondientes al Tramo I (Palenque-Escárcega), donde se ubican Palenque, Pomoná, Moral-Reforma y 480 sitios arqueológicos registrados, entre ellos Aguada Fénix, recientemente descubierto, con el fin de hacer del conocimiento a Fonatur los puntos críticos con alta presencia de vestigios arqueológicos, mismos que se encuentran en proceso de valoración.
Es preciso indicar que el Instituto considera un área de influencia de 30 kilómetros, 15 a cada lado de la vía, debido a que el Tren Maya será de alta velocidad, lo que requiere de curvas muy amplias para evitar accidentes.
En ese margen de 30 kilómetros se tienen 1,773 sitios inscritos en el Registro Público de Monumentos y Zonas Arqueológicos e Históricos, que van desde concentraciones de materiales y sitios de carácter gráfico-rupestre, hasta monumentales.
Cabe recordar que desde octubre de 2018, el INAH tuvo conocimiento del Proyecto del Tren Maya (PTM), donde se ponderó el alto potencial arqueológico que podría estar en riesgo por esta obra, por lo que se solicitó a Fonatur el trazo mismo de la ruta, el Proyecto Ejecutivo para la construcción del Tren Maya que fue evaluado en reuniones extraordinarias por el Consejo de Arqueología de la institución, organismo colegiado que el 23 de enero de 2020 determinó que el proyecto es viable, pero que se debería acompañar de los programas y trabajos arqueológicos apropiados para evitar afectaciones al patrimonio arqueológico
Síguenos en Google News y recibe la mejor información
GH