Gilberto Balam Pereira
Al tomar posesión como Presidente de la SCJN, Arturo Zaldívar fue interrogado por la prensa, de que si guarda amistad con López Obrador, habiendo respondido poco enfático: “sí, lo he tratado”.
Pero para los que tienen dudas, sabemos que la amistad se va cultivando con base en identidad de principios.
Ahora que presenciamos una situación de movimiento en la Corte, Zaldívar emitió una valiosa opinión: “un buen gobierno comienza con la erradicación de la corrupción, precepto con el que estamos de acuerdo con nuestro Presidente. Por la misma razón la combatiremos en esta instancia a mi cargo”.
Zaldívar conocía el ambiente de la Corte
140 amparos presentados con motivo del Aeropuerto de Santa Lucía delataba el intervencionismo de Jueces y Ministros en el asunto, a cambio de unos ¡80 millones de pesos! Suerte de los 140 amparos con la autoría de los profesionales de la Corte.
El Presidente Zaldívar, en primer término dio de baja a Medina Mora porque en ese momento todavía los legisladores no recibían la renuncia de MM.
En brevísimo plazo Zaldívar aplicó la misma medida al Magistrado Jorge Camero, quien poco antes se vio obligado a extorsionar con una gran suma al “Westhill Institute”, colegio donde uno de sus hijos ultrajó a una adolescente. Segunda baja en la Corte en una semana y todavía hay más.
El fiscal Santiago Nieto, en carreras
No paraba ahí la cuestión. Era indispensable conocer el origen de los 80 millones que había absorbido la Corte, y sabiéndose la autoría de los amparos, resultaba obligatorio rastrear los pasos de Claudio X González y sobre todo congelar sus cuentas bancarias.
¡Oh my god! Sorpresas que da la vida. Con estos particulares y sorpresivos pasos que da el fiscal Nieto, todos se persignan.
Pero Claudio X no está actuando solo, por supuesto.
Claudio X González, su dinero y su pandilla
El tal Claudio y su brazo derecho, el ex Vicepresidente de Televisa Alejandro Ramírez, quienes fueron adversarios de por vida, de López Obrador, han sido los organizadores de la constante guerra sucia contra AMLO.
Por esta razón tienen rentados dos amplios despachos para llevar al cabo el manejo de los gastos, la organización, discusión de objetivos y estrategias para mantener el contrapeso de su adversario.
Por de pronto, Ramírez ha puesto “pies en polvorosa” por lo que pudiera venir. Dejó a Claudio X oyendo gatos en el tejado.
Llamar a un gobernador huevón
Le había ya colmado el plato, en visitas del Presidente. “Ponte a hacer algo útil, no seas huevón” dijo el Presidente, además, “da pena ver esa nómina del gobierno de Morelos; es tan larga la lista de tus parientes que me dio flojera y vergüenza leerla toda” dijo AMLO a Cuauhtémoc Blanco, gobernador de Morelos.
La gente le comentó a López Obrador que los caminos y las carreteras del estado se encuentran en pésimas condiciones.
Resulta que Cuauh “nunca se para en Morelos”. Un hermanastro ha sido encargado de las funciones del gobierno, muy mal ejecutadas y con errores y corrupción. Mientras, el gobernador se la pasa en Nuevo León en francachelas, orgías y ociosidad. ¡Qué tal!
¿Qué pasa con las autoridades agrarias locales?
Sitpach es una comisaría que ha tenido un cierto grado de desarrollo inmobiliario, lo que ha causado problemas a los ejidatarios que se quejan del abaratamiento y las condiciones en que pagan los abonos de las mismas, los acaparadores.
Otro caso muy similar presentan los campesinos de la comisaría de Ucú. Aquí se torna más difícil y ambiciosa la compraventa por la razón de que se trata de un área donde el gobierno Federal ha planeado realizar estructuras educativas, por lo que los especuladores de tierras están causando problemas entre los habitantes del lugar.
Estos son sólo dos focos problemáticos que ahora mencionamos, porque hay en nuestro estado muchos conflictos de tierras que nunca abordan las autoridades quizá por negligencia o cuestión de “moches”.
Lo anterior es una tremenda contradicción porque se dice que el mejor gobernador es el de Yucatán (¿?). La verdad, no sé sobre esto último.
Además, AMLO repite diariamente que en el país ya no hay corrupción. ¿Será?
¿Ni en Yucatán?