ÚLTIMA HORA
México
INE oficializa la pérdida de registro como partido político para el PRD
Volver
ÚLTIMA HORA
México
INE oficializa la pérdida de registro como partido político para el PRD
Volver
Por Redacción Por Esto!
19 de Sep de 2021
2 min
Escrito por Redacción Por Esto!
Hasta el siglo XVIII, en Europa y sus colonias los monarcas, cabezas visibles de la realeza, eran los soberanos, los demás súbditos, sin derechos, presencia ni participación. La nobleza era una clase parasitaria que gobernaba a perpetuidad y por herencia, de modo unipersonal, arbitrario y violento con exclusión de todos los estamentos sociales, excepto el clero, cuyas jerarquías eran parte del andamiaje del poder.
Todo cambió cuando en aquella centuria las revoluciones reivindicaron a los pueblos y entronizaron la democracia. Desde entonces, los pueblos y no los monarcas, como tampoco los presidentes y primeros ministros fueron los soberanos, llamados “mandatarios”, no porque manden sino porque son depositarios de un mandato que el pueblo les ha entregado y que rige por períodos de tiempo preestablecidos.
Desde entonces, al menos doctrinariamente, los pueblos y paísestienen gobiernos, no al revés. En Estados Unidos y Europa la democracia avanzó con éxitos variables relevantes, contribuyendo poderosamente a la estabilidad política, el crecimiento económico y el progreso general. Donde el presidencialismo fracasó, salvo contadas excepciones, fue en Iberoamérica donde, concluidas las luchas por la independencia, las repúblicas fueron asumidas como botín por las burguesías y las oligarquías criollas, los militares y el clero.
Tampoco las extraordinarias virtudes que la convierten en la más importante categoría política conocida, la democracia no pudo impedir el caudillismo, la implantación de dictaduras y el desarrollo del imperialismo, el auge del colonialismo ni el surgimiento y crecimiento del militarismo y del nazi-fascismo, así como de otras variantes del autoritarismo.
Si bien la soberanía popular, los comicios, la separación de poderes y el estado de derecho, en los límites y con las imperfecciones que presentan en cada lugar, son conquistas magníficas, ninguna es tan relevante como el establecimiento de los derechos de los ciudadanos, base y fi n de toda la institucionalidad, ejes del progreso y la paz y sin los cuales nada es posible.
Los ciudadanos son todo: son los pueblos y sus estamentos, las clases y capas de las sociedades, son visibles en las más encumbradas jerarquías y en las más humildes presencias, ellos lo hacen todo; producen en las fábricas y labran la tierra, enseñan y aprenden en escuelas y universidades, dan vida a las ciencias y crean las manifestaciones culturales, son ministros y labriegos, hombres y mujeres y personas sexo-diversas. Los ciudadanos son la columna vertebral de las naciones y los estados nacionales.
Los derechos de los ciudadanos son la más grande prerrogativa jurídica, política y humana existente y su vigencia es la primera obligación de gobiernos y administraciones.
Los ciudadanos tienen todos los derechos, entre ellos a apoyar, oponerse y pensar diferente, ratificar y disentir, aplaudir y protestar y su protección es el cometido esencial de las fuerzas del orden. Los derechos de los ciudadanos no están mediados ni matizados por credos, ideologías o militancias políticas.
Los derechos ciudadanos preceden y presiden todos los derechos.
NEWSLETTER POR ESTO!
Suscríbete y recibe la información más relevante
Suscríbete a: