Opinión

Elecciones en Yucatán

Carlos Bojórquez Urzaiz comparte su opinión respecto a las elecciones en Yucatán
Columna de Carlos E. Bojórquez Urzaiz

El estado de cosas que en materia electoral observa Yucatán, reúne una serie de retos que deben asumir con responsabilidad las instituciones encargadas de regular los sufragios, los partidos políticos, al igual que los actores directos de las contiendas, la sociedad en su conjunto, y desde luego los medios de comunicación, sin dejar de lado las redes sociales.

En este sentido, resulta de interés público que podamos escalar a un escaño donde el debate entre los oponentes se centre en asuntos menos miserables que los cotilleos y rumores que circulan, o en biografías de personajes políticos que la mayoría de las veces resultan engañosas, a efecto de conocer mejor las plataformas y proyectos que estos organismos partidarios pondrán en contraste para tratar de atraer la voluntad de los ciudadanos. Vale la pena recordar, además, que, si bien el momento más álgido de la actividad partidista ocurre en las coyunturas electorales, es deseable que prevalezca la cordura y civilidad como palabras de pase. Palabras que, sin embargo, han estado ausentes en actos como la dolorosa -y poco aclarada- muerte de un joven militante de Morena en Chankom, durante una reyerta provocada por los caciques que han mantenido la hegemonía de ese municipio durante muchos años, así como las agresiones contra candidaturas del propio Movimiento de Regeneración Nacional en Tekantó, donde la aspirante a la alcaldía, Flory Cen Balam, ha sufrido agresiones físicas y amenazas de muerte hacia ella, sus familiares y colaboradores, cuya denuncia correspondiente fue presentada ante la Fiscalía General del Estado.

Sobre seguro podemos decir que se han echado a andar tantas maquinarias mediáticas y falsas noticias como sea posible. Pese a ello, sería deseable que los partidos políticos se ofrezcan abiertos al diálogo con quien desee debatir, y completamente libres, como verdaderos espacios de discusión sobre asuntos de interés colectivo con los que se identifique o no el probable elector. Y es que en ese ámbito será en el que se tendrán que traducir las plataformas electorales a la sencillez del habla popular, para explicar los conceptos de desarrollo humano y demás propuestas que ofrecen las dos tendencias partidarias principales, de quienes se espera que hayan conformado sus proyectos de Gobierno interactuando con los diversos grupos sociales de Yucatán.

En el ámbito nacional los bloques que están en contienda se dejan ver, por un lado, mediante una sólida formación de izquierda que durante los días 30 y el 31 de octubre de 2022 ratificaron su afiliación o se afiliaron a Morena dos y medio millones de personas, un acontecimiento político que, de acuerdo con Armando Bartra, nunca antes se había visto en México, después de haber ganado cómodamente las elecciones presidenciales de 2018 con 30 millones de votos. En el otro costado, se presentará una alianza insondable, antinatura política según algunas voces autorizadas, de tres partidos históricamente opuestos, y aunque siempre se declararon ideológica y programáticamente opuestos, a la luz de la mirada actual y los hechos presentes, se juntan y se dan la mano, defendiendo los mismos intereses políticos y de clase, y de encima -o quizás por lo antes dicho- revelan una notoria disminución cuantitativa de sus militancias. Si las elecciones presidenciales se efectuaran el día de hoy, los pronósticos colocan a la candidata de Morena, doctora Claudia Sheinbaum Pardo, como indiscutible ganadora, frente a su más cercana contrincante Xóchitl Gálvez.

¿Está impactando esta tendencia nacional de los bloques progresista y conservador en la elección del próximo gobernador o gobernadora de Yucatán?

En principio, vale la pena destacar el ingente esfuerzo realizado por las autoridades locales emanadas del PAN, intentando presentar como propias de su Gobierno las grandes obras federales, obras de calado profundo como el Parque de La Plancha, el Tren Maya o la construcción del nuevo Hospital General Dr. Agustín O’Horán. Paradójicamente, pese al indudable avance de estos y otros proyectos federales, algunos protagonistas de la debilitada derecha yucateca, intentan infundir miedo entre la gente ante el eventual triunfo que, según las casas encuestadoras más serias, y el ánimo popular palpable en cada rincón del Estado, recaerá en Huacho Díaz Mena, de la coalición Morena, PT, Partido Verde Ecologista.

Se han divulgado varios aspectos de los planes de Gobierno de la izquierda, entre los que destaca la salud, la economía, la seguridad y la educación y la cultura; en tanto los conservadores yucatecos han focalizado su acción más en denostaciones contra sus adversarios que en asuntos programáticos. Hasta aquí, se avizora un proceso electoral complejo y competido, pero si los hechos y dichos de los unos y los otros se anticipan en el contenido de las plataformas y programas de los partidos en contienda, no es difícil percibir el rumbo que tomarán las cosas