Por José Ramos
CHETUMAL, 2 de noviembre.- Florerías de la ciudad reportaron apenas un 20 por ciento de incremento en su ventas durante las celebraciones del Día de Muertos.
La demanda de gladiolas, claveles, crisantemos y cempasúchil originó que florerías registren un incremento de entre el 15 y el 20 por ciento durante la celebración del Día de Muertos en la capital del estado.
Desde el pasado 30 de octubre y hasta este 2 de noviembre, florerías de la capital del estado mantuvieron un repunte en su actividad comercial; sin embargo, las ventas más altas se registraron durante el viernes y el sábado.
Las actividades relacionadas con esta celebración, tanto en escuelas como en dependencias públicas, generaron gran demanda de flores durante el pasado miércoles y jueves; no obstante, los días más fuertes para los negocios dedicados a la venta de flores fue el 1 y 2 de noviembre.
Sin embargo, las ventas en general de las florerías en Chetumal apenas y pudieron generar un repunte del 20 por ciento, ya que mientras hubo demanda de ejemplares de cempasúchil, nube, terciopelo, claveles y crisantemos, por otro lado las flores como las rosas, girasoles y gerberas se estancaron.
La limitada economía, los vendedores ambulantes y la posibilidad de un incremento al precio del producto, pudo haber incidido para que florerías en la capital del estado no hayan podido alcanzar el repunte esperado.
Y es que durante la temporada de Día de Muertos las ventas de flores comúnmente registran un repunte importante; no obstante, los comerciantes dedicados exclusivamente a la venta de flores reconocen que la derrama ya no es la misma como en otros años, ante la difícil situación económica y la creciente competencia.
La venta de flores, rosas o arreglos en general para temporada de Día de Muertos ya no es como en años pasados, donde los chetumaleños adquirían diferentes obsequios para los fieles difuntos.
Lo anterior ante la difícil situación que se vive actualmente en la capital y la creciente competencia por parte de vendedores ocasionales en mercados municipales, panteones y hasta en los supermercados.
La limitada economía, los vendedores ambulantes y la posibilidad de un incremento al precio del producto, se encuentra impactando a las florerías establecidas en la capital del estado, las cuales ya no pueden duplicar sus ventas durante la temporada de Día de Muertos.