Quintana Roo

Evidente compadrazgo en Aseqroo

De la Redacción

CHETUMAL, 28 de junio.- Permitido por el auditor superior del estado, Manuel Palacios Herrera, en la nómina del órgano fiscalizador se encuentran tres familiares de la directora de Planeación y Normatividad Técnica, María Guadalupe Ortiz Yeladaqui.

Esto es una clara muestra que la auditoria se ha convertido en una agencia de colocaciones, pues en materia de fiscalización de recursos sólo ha servido para el maquillaje del desvió de recursos públicos en Quintana Roo.

En el caso de la directora de Planeación y Normatividad Técnica, María Guadalupe Ortiz Yeladaqui, puede sentirse en familia en la oficina, siendo que su hermano Julio Ortiz Yeladaqui es asesor en la Aseqroo; además de que su sobrino Efraín Ortiz González es jefe del Departamento de Gestión de Usuarios. La esposa de Efraín Ortiz González también tiene trabajo en el órgano que encabeza Manuel Palacios Herrera, siendo que tiene cargo de auditora.

Esta sólo es una muestra del amiguismo, compadrazgo y corrupción al interior de la Auditoria Superior del Estado, que en próximas entregas se darán a conocer más casos similares que involucran a auditores, supervisores, directores, jefes de departamento y personal del auditor superior.

Como se ha expuesto, la Aseqroo funge más como una agencia de colocación de familiares de los funcionarios, que como el órgano fiscalizador de los recursos públicos.

De tal manera, además de la protección desde la Aseqroo a los gobiernos panistas, por tratarse del partido que nombró a su titular Manuel Palacios Herrera, éste es cómplice del influyentismo al permitir que funcionarios del órgano fiscalizador les sea común que incrusten en la nómina familiares de los funcionarios.

Son muchos los casos que demuestran que la Aseqroo es una auténtica agencia de colocaciones, lo cual evidentemente es permitido por Manuel Palacios Herrera, incluso su personal más cercano ha incurrido en estos actos, para que el presupuesto de este órgano fiscalizador “quede en familia”.

En tanto, no se cumple el objetivo de la correcta fiscalización de los recursos públicos y sólo ha sido instrumento para proteger malos manejos, tanto en el Congreso del Estado como en los municipios aliados de los partidos que impusieron a Manuel Palacios Herrera, aun cuando él mismo reconoció que maquillaba cuentas públicas del gobierno de Roberto Borge Angulo y anteriores.

Palacios Herrera era el auditor en materia financiera hace un par de años, pasaba sin mayores observaciones todas las cuentas públicas de la administración de Roberto Borge y precisamente su lealtad al gobierno en turno es lo que le permitió ser nombrado por la XV Legislatura como auditor superior, para taparle las espaldas a los gobiernos del PAN-PRD.