Por José Ramos
MAJAHUAL, OPB, 28 de julio.- Por segundo fin de semana consecutivo las playas a lo largo del malecón de Majahual lucieron libres de sargazo y con buena presencia de bañistas.
Actualmente, los restauranteros registran un 60 por ciento de ocupación al igual que los hoteleros, mientras los servicios náuticos se recuperan y ya reportan operaciones hasta en un 50 por ciento.
La ausencia de turistas que marcó el arranque de la temporada vacacional en Majahual se ha ido resolviendo al cierre del mes de julio, con la disminución gradual en el acumulamiento de sargazo en sus costas.
Hasta este fin de semana, la actividad en Majahual resultó alentadora para los prestadores de servicios, luego de que mantienen ocupaciones promedio en un 60 por ciento y con lo que sumarian más de 10 días con cifras positivas.
Lo cierto es que por segunda semana consecutiva, las playas del malecón de Majahual lucen limpias, pues el arribo de sargazo ha sido poco gracias al paso del frente frío número 62 y a la labor de los brigadistas contratados por los empresarios.
Prestadores de servicios turísticos, en especial náuticos, dicen haber tenido un ligero repunte desde la última semana, debido a la temporada vacacional.
Por su parte, los restauranteros son el sector que más recuperación ha reportado, pues la presencia de turistas nacionales en los últimos 10 días ha ido incrementando considerablemente.
La ocupación hotelera se mantiene por arriba del 60 por ciento entre semana y durante el fin de semana reportó cifras de hasta el 75 por ciento en promedio.
Durante el pasado sábado y domingo, el recale de sargazo a las playas de la entidad disminuyó gracias a las lluvias y vientos registrados en la región.
Las condiciones meteorológicas resultaron favorables para las playas de Quintana Roo, principalmente las propiciadas por el frente frío 62, que en las últimas horas avanzó sobre el noroeste del Golfo de México.
Según el Servicio Meteorológico Nacional (SMN), este frente frío se combinó con canales de baja presión en el noroeste y centro del país, y originó lluvias en la Península de Yucatán, lo cual favoreció al desplazamiento del sargazo.