El municipio de Tulum presenta el mayor incremento de homicidios dolosos en el estado en lo que va del año, con 67 por ciento, comparado con el mismo período de 2019, de acuerdo con el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP).
Lo anterior, al pasar de 32 homicidios dolosos en 2019 a 50 en lo que va del año, contando las seis ejecuciones con violencia que se registraron el pasado fin de semana.
James Tobin Cunningham, invitado permanente al Consejo Nacional de Seguridad Pública, señaló que lo que está ocurriendo en ese municipio es muy preocupante, por lo que las autoridades deben detener a los responsables.
Lo anterior, luego de que el fin de semana en ese destino turístico ocurriera la ejecución de cinco personas en un bar clandestino y otra más en pleno centro de la ciudad.
“Es muy preocupante lo que pasa en Tulum, tiene que haber trabajo de investigación para que detengan a los responsables y los pongan a disposición del Ministerio Público para que respondan”, subrayó.
“Tulum se ha visto con un alza en la incidencia delictiva de manera consistente, es de los municipios que más ha incrementado, con 67 por ciento hasta septiembre, comparado con el mismo período de 2019”, precisó.
De acuerdo con cifras del SESNSP en cuanto a homicidios dolosos por municipios, Benito Juárez redujo la incidencia, a 7.4 por ciento en lo que va del año.
En el caso de Isla Mujeres, aumentó 17 por ciento; Solidaridad bajó 48 por ciento; Tulum aumentó 61 por ciento; Cozumel no tuvo variación, al igual que Othón P. Blanco; mientras que Bacalar disminuyó a 28 por ciento.
En Felipe Carrillo Puerto la incidencia de homicidios aumentó 10 por ciento; José María Morelos, bajó 100 por ciento; Lázaro Cárdenas, disminuyó 33 por ciento y Puerto Morelos también se fue a la baja, de 11 a 9 por ciento.
En Quintana Roo hubo 453 homicidios dolosos durante los primeros nueve meses de 2019 mientras que en este año van 408, lo que representa una disminución de 9.9 por ciento, de acuerdo al Secretariado, señaló James Tobin.
Percepción de inseguridad es relativa
La Encuesta Nacional de Seguridad Urbana (ENSU) revela que Cancún bajó en percepción de la inseguridad de 85.6 por ciento a 81.5 por ciento; es decir, 4.1 puntos porcentuales menos.
Al respecto, Tobin Cunninghan indicó que estos índices son un promedio con los que la gente puede decir que mejoró la seguridad en el estado; sin embargo, habría que preguntar a los habitantes de Tulum si para ellos es cierto.
“Antes, la violación simple estaba clasificada por la Fiscalía como un delito de violencia familiar y era bajo el índice, pero al tipificarlo como violación simple el porcentaje se disparó 191 por ciento”, subrayó.
Precisó que si se quiere tener una medición adecuada de la incidencia delictiva no se puede hacer caso de una sola fuente como la Fiscalía; ante la falta de denuncia se debe atraer información de todas las fuentes fehacientes.
En este sentido, explicó que el SESNSP tiene un proyecto para crear un nuevo sistema de medición de la actividad delincuencial mucho más eficiente que sólo el de la Fiscalía.
Falta de denuncia
“Se trata de medir adecuadamente, ya que la falta de denuncia no permite a las corporaciones tomar acciones basadas en cifras reales, porque sólo se denuncia una mínima parte de los delitos cometidos”, dijo.
En este nuevo sistema, añadió, se busca reunir información de fuentes como las redes sociales o el número de emergencia 911, y no sólo de las denuncias que llegan ante el Ministerio Público.
Indicó que en el caso del delito de robo la mayoría de los diferentes tipos bajaron este año, como el de vehículos sin violencia, a 22 por ciento; de motocicleta sin violencia, disminuyó 10 por ciento y a negocio con violencia, bajó 26 por ciento.
En el caso del robo a negocio sin violencia, bajó 44 por ciento; el de casa habitación con violencia también disminuyó 27 por ciento; mientras que el de casa habitación sin violencia se redujo 45 por ciento.
Por su parte el robo a transeúnte con violencia subió 1.9 por ciento y sin violencia bajó 21 por ciento; el homicidio doloso bajó 9.9 por ciento; lesiones con arma de fuego descendió 72 por ciento, el secuestro disminuyó 38 por ciento y la extorsión subió 1.7 por ciento.
En el caso de la violación simple subió 191 por ciento y la equiparada descendió 100 por ciento; el delito de amenazas se redujo 10 por ciento y el de narcomenudeo aumentó hasta 105.7 por ciento, según reporte del SESNSP.
Por Lino Sarmiento