En los sectores más pobres de la población se registra el mayor consumo de alcohol, y como consecuencia de ello, actualmente están reportando muchos casos de violencia doméstica, reveló Miguel Caamal Gio, médico de esta localidad.
Expuso que el alcohol ha permeado mucho la sociedad, pues ahora toman tanto los hombres como las mujeres y que muchas veces terminan internados en centros de rehabilitación.
Refirió que el alcoholismo está reconocido por la Organización Mundial de la Salud (OMS) como enfermedad porque provoca trastornos biológicos.
Reconoció que muchos creen que consumir alcohol quizás no sea tan malo, pero al abusar de ello, terminan sin posibilidades de salir más que a través de acciones de rehabilitación en centros como Cottolengo o acercándose a los centros doble A.
Comentó que un alcohólico derrocha todo el dinero que gana en su vicio, y no le importa su familia, y por lo mismo, terminan en problemas serios con sus parejas.
Agregó que en el medio se consume mucho alcohol, no solamente en fiestas, sino en todas partes, porque la gente no toma para convivir, sino para emborracharse.
Un ciudadano de la cabecera municipal, quien dijo haber salido hace algunos años de un centro de rehabilitación, indicó que un alcohólico no toma por antojo, sino por vicio, por dependencia y puede pasar días consumiendo alcohol, muchas veces hasta de lo que se prohíbe como el que se vende en las farmacias.
Dijo que en varios lugares hay los llamados “escuadrones de la muerte”, por personas que ya son totalmente dependientes del alcohol.
Recordó que consumir bebidas embriagantes quizá “no sea malo para la salud, siempre y cuando sea con moderación”, ya sea en convivencia familiar o alguna fiesta familiar.
Por Lusio Kauil