Monseñor Pedro Pablo Elizondo Cárdenas señaló este domingo que no se puede permitir que la violencia se apodere de la ciudad de Cancún, esto debido a la fotografía que apareció en un periódico local, y que recorrió el mundo, en la que un policía exhibía su arma durante las manifestaciones llevadas a cabo el pasado lunes por el secuestro y asesinato de la joven Alexis, el cual sería el doceavo homicidio cometido contra mujeres en la ciudad.
En este sentido, añadió que los cuerpos de seguridad no pueden darse el lujo de salir en todos los periódicos con las pistolas, porque esta situación ahuyenta y espantan a los turistas y genera mucho miedo en los ciudadanos. “No podemos permitir que la violencia se apodere de esta ciudad porque vivimos del turismo y de hecho ante los turistas tenemos una buena imagen que representa seguridad”, expresó.
Asimismo dijo no estar de acuerdo con las manifestaciones que dicen ser pacíficas, ya que las mismas terminan tornándose violentas y sus participantes terminan destruyendo instituciones y todo lo que consigan a su paso. “La violencia sólo engendra más violencia”, resaltó el padre, por lo que en este caso hizo un llamado a los manifestantes a buscar vías expeditas que le permitan comunicarse y dialogar.
Por otra parte, al preguntarle su opinión con respecto a que la Secretaría de Seguridad Pública Municipal será ocupada por una mujer, expresó: “Los cargos públicos le tocan a las autoridades designarlos y a nosotros (la iglesia), nos toca respetar y darles el voto de confianza y esperar que con esta situación tan seria y tan grave para Cancún y Quintana Roo, mejore y se tomen acciones que puedan ayudar a controlar este tipo de acciones de violencia en la ciudad”.
Por otro lado, adelantó que en la catedral se harán algunas remodelaciones en las que la idea es fusionar las culturas maya y cristiana. La estructura contará con techo de palapa para hacerla más regional. Algunas paredes estarán forradas en pura piedras; asimismo se le sembrarán más árboles por las instalaciones para hacerla más verde. La estructura que hoy día es abierta no sufrirá cambios, aseguró. También llevará una pirámide maya grande con una cruz enorme en la punta, igual que hace 500 años. La obra deberá estar terminada en tres años, antes de que termine su período.
Asimismo recordó que el pasado lunes 10 de octubre se ordenaron 21 diáconos y para el próximo jueves 19 de noviembre se espera ordenar a siete sacerdotes y 21 nuevos diáconos permanentes, los cuales estarán al servicio de la iglesia.
Recordó que el próximo sábado 21 de noviembre habrá una gran celebración de júbilo y de acción de gracia y de compromiso celebrar la nueva Diócesis y festejar el cincuenta aniversario.
En este sentido recordó que el júbilo en esta ocasión representa los años de crecimiento que ha tenido la iglesia, ya que de cinco parroquias, hoy se cuenta con 74 y de cinco o seis sacerdotes, actualmente hay 154.
“Ha sido un crecimiento en fieles, iglesias, sacerdotes, seminaristas y religiosas y eso es lo que debe alegrarnos, el crecimiento de la iglesia en estos 50 años. Ahora nos toca consolidar ese crecimiento y hacer que la pastoral sea más orgánica, estructurada y más especializada y en este caso nos vamos a dedicar a atender a los jóvenes y darles buena formación para que sean discípulos y misioneros”.
Por María Isabel Dávila