El abordaje para el ferry de Ultramar, empresa que ofrece el cruce de Playa Tortugas a Isla Mujeres, no tiene un filtro sanitario en el acceso; sólo con el ticket en mano los turistas ingresan sin mayor problema, por lo que hay altas probabilidades de contagio de coronavirus entre los usuarios.
Este sábado, la primera salida fue a las 9 horas y la última operación fue a las 21:15 horas, por lo que programaron aproximadamente 24 operaciones.
Los visitantes poco a poco fueron llegando, algunos en pareja y otros con familias completas, para disfrutar de un día en la isla; sin embargo, fue notable que los empleados de la naviera no cumplían con la medida del uso obligatorio del cubrebocas, lo que deja una mala imagen entre los turistas nacionales e internacionales, pero sobre todo, exponen a todos ante la pandemia.
La compañía aumentó sus frecuencias de Playa Tortugas hacia Isla Mujeres y viceversa desde que inició diciembre, debido al incremento de pasajeros que registró desde esa fecha. Actualmente las salidas de los barcos son cada 30 minutos, lo que agiliza el flujo de visitantes que quieren cruzar, pero también la cantidad de pasajeros movilizados.
Durante la semana pasada Isla Mujeres se mantuvo en 226 contagios acumulados de COVID-19 desde marzo, cuando se registró el primer caso positivo en Quintana Roo.
A pesar de que varios sectores firmaron un Pacto de Reactivación Económica con el gobierno estatal para cumplir con los protocolos de seguridad con tal de que los contagios no sigan a la alza, la naviera no lo está respetando.
Esta no es la primera que Ultramar no acata medidas, pues en el caso de la Sana Distancia, hace unos días la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) le impuso una multa por 120 mil pesos, ya que no respetó el limite de capacidad permitida del 60 por ciento que indica el Semáforo Epidemiológico amarillo. De hecho, fue la primera empresa sancionada por ese motivo, pues de manera reiterada rebasó el cupo establecido por las medidas sanitarias contra el COVID- 19 entre julio y septiembre.
Los usuarios utilizaron las redes sociales para denunciar a la naviera, por lo que la Cofepris tomó cartas en el asunto, ya que en las imágenes difundidas se pudo observar que no se respetaba la Sana Distancia, pues la norma establece que se debe dejar espacio suficiente entre cada persona, lo cual incumplió en repetidas ocasiones la empresa.
La sanción se impuso tras comprobar que la naviera propició la situación al vender boletos que superaban incluso 100 por ciento de su capacidad, cuando el aforo máximo permitido era 60 por ciento, de lo cual no informaban a los pasajeros.
CG