En medio de un mar de manifestantes y seguidores, el presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador ingresó al evento programado al interior de la zona arqueológica de Tulum.
El ímpetu de los asistentes por querer expresar sus muestras de inconformidad y otros su apoyo al mandatario, provocó que se rompieran todos los protocolos sanitarios, puesto que se aglutinaron a los alrededores de la Suburban blindada.
López Obrador, por medo, de la ventana de vidrio trató de escuchar a paramédicos -en su mayoría-, miembros de organizaciones y simpatizantes.
CT