Tras su visita a la zona arqueológica de Tulum, Andrés Manuel López Obrador, presidente de la República, se retiró y nuevamente fue abordado por decenas de manifestantes y seguidores que se apostaron desde las primeras horas del día a las afueras de la sede del evento que se realizó momentos antes.
El mandatario de nueva cuenta fue abordado por seguidores y manifestantes, entre los que se destacaron trabajadores del área de la salud, quienes exigieron que se les pague el monto proveniente del bono COVID-19 por parte del gobierno del estado.
A la salida del mandatario, poco importó la sana distancia y las medidas sanitarias, toda vez que se conglomeraron decenas de personas alrededor de la camioneta que trasladaba el Ejecutivo federal.
Pese a los minutos de tensión, el evento se llevó a cabo sin aspavientos de principio a fin. Posterior a su actividad, el recinto maya reabrió sus puertas y decenas de turistas comenzaron a entrar.
López Obrador finalizó su gira de trabajo que lo llevó por los cinco estados que comprenden la ruta del Tren Maya.
CT