Hasta antes de la pandemia, los niños de la comunidad maya de Javier Rojo Gómez bajaban a estudiar a la Escuela Primaria Andrés Quintana Roo, de la localidad de La Esperanza, porque al poblado dejaron de mandar maestros, a pesar de que existe una escuela en muy buenas condiciones, dio a conocer ayer don Felipe de Jesús Canché, comisario ejidal de ese lugar.
Indicó que la escuela funcionó muy bien durante unos cuatro años cuando estuvo como profesor don Victoriano Teh López, luego mandaron otros profesores, pero la escuela ya no funcionó igual.
Recordó que la última profesora que mandaron a trabajar a la Escuela Vicente Guerrero estaba enferma y por lo mismo no estuvo mucho tiempo en el lugar.
Desde entonces las familias del poblado empezaron a mandar sus hijos a la Escuela Primaria Andrés Quintana Roo, de la localidad de La Esperanza, porque ya no volvieron a mandar maestro en la escuela.
De esta manera, la escuela primaria quedó abandonada y el kínder que se construyó al lado de ese plantel educativo, tampoco funcionó, porque no mandaron a nadie para que dé clases ahí, manifestó.
Según don Felipe de Jesús Canché, de Javier Rojo Gómez a la localidad de La Esperanza hay una distancia de tres kilómetros, pero los niños del poblado se acostumbraron a caminarlos todos los días.
La autoridad ejidal refirió, por otro lado, que el camino que enlaza ambos poblados, que es de terracería, se encuentra deteriorado desde hace varios años.
Expuso que esa carretera fue construida durante la administración del profesor Fermín Sosa Castilla (1984-1987) y desde entonces no se ha reparado ni se ha rehabilitado.
La autoridad ejidal pidió al ayuntamiento actual que vea la manera de que ese se rehabilite una vez que concluya la reconstrucción de la carretera José María Morelos-La Esperanza, para que, cuando reinicien las clases, los niños puedan transitar sin problemas por ese camino.
CG