Con la suspensión de labores en el Congreso del Estado, bajo el argumento de la pandemia por COVID-19, quedaron canceladas las sesiones de la Comisión Permanente que se llevarían a cabo del 1 al 14 de febrero.
Con esto tampoco se realizará la sesión extraordinaria donde estaba previsto atender la solicitud del gobierno de Quintana Roo, mediante la cual busca que la XVI Legislatura le autorice la contratación de uno o más financiamientos por un monto de hasta 820 millones de pesos.
Esto es porque la Junta de Gobierno y Coordinación Política (Jugocopo) de la XVI Legislatura, encabezada por el diputado Gustavo Miranda García, determinó el pasado 26 de enero la suspensión de labores y los términos procesales legislativos y legales del Congreso del Estado.
La medida se hizo argumentando la protección de la salud e integridad de los trabajadores del Poder Legislativo, en sintonía con las acciones de los gobiernos federal y estatal en el combate de la propagación, mitigación y control de la pandemia generada por la enfermedad del COVID-19.
La suspensión de labores y actividades legislativas se mantendrá hasta el 15 de febrero del año en curso, fecha en la que debe iniciar un nuevo periodo de sesiones ordinarias de la XVI Legislatura, tal y como lo establece el artículo 25 de la Ley Orgánica del Poder Legislativo.
Con esta determinación en automático se cancelan las últimas dos sesiones de la Comisión Permanente del Congreso del Estado, que estaban previstas a realizarse los días 2 y 9 de febrero.
Tampoco se realizará el tercer periodo extraordinario de sesiones, en el cual las diputadas y diputados discutirían y someterían para su aprobación la solicitud presentada por el gobierno estatal, mediante la cual busca contratar uno o más financiamientos por hasta 820 millones de pesos, lo cual sería pagado en un plazo de hasta 20 años.
Dicha solicitud ahora tendrá que ser atendida en el periodo de sesiones ordinarias, que inicia el próximo 15 de febrero y concluye el 31 de mayo de 2021, aunque es posible que algunos legisladores ya no participen en este asunto, pues podrían dejar a sus suplentes en caso de ser favorecidos con una candidatura en las elecciones del 6 de junio del año en curso.
Cabe mencionar que las actividades legislativas están catalogadas como esenciales en esta emergencia sanitaria por COVID-19, por lo que el Congreso de Quintana Roo debería continuar trabajando tal y como lo hacen los Congresos de las demás entidades federativas.
MA