La comunidad LGBT es una de las más golpeadas por el Virus de la Inmunodeficiencia Humana, pues en 2020 se registraron 413 casos de VIH en el Estado, 85 por ciento de ellos son hombres, de acuerdo con un estudio de la Asociación de Prevención Detección y Atención Integral Ante la Respuesta VIH y SIDA, Círculo Social.
Miguel Dzib, líder del colectivo Conciencia LGBT en Cancún, informó que reciben en promedio 10 casos por mes, a los cuales les brindan el acompañamiento necesario a través de sus programas.
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Señaló que durante la pandemia, la detección de VIH se vio mermada, por lo que se registraron menos casos que en años anteriores, lo que no significa que los contagios hayan disminuido.
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“La emergencia sanitaria nos afectó muchísimo, porque se dejaron de hacer pruebas para esta enfermedad, por lo que es erróneo el pensar que ha desaparecido, al contrario, entre más pruebas se hagan, más se va a visibilizar la situación”, dijo en entrevista para Por Esto!
Dzib reveló que la comunidad Lésbico Gay sigue estigmatizada respecto a esta enfermedad, pues la sociedad cree que los homosexuales pueden estar contagiados o no se cuidan. “Han sufrido acoso y agresiones por ello. Muchos tienen miedo de enfrentar la situación por el rechazo y prefieren callar, poniendo en riesgo su salud”, continuó.
Gerardo 'T', de 21 años de edad, dijo que vivió un infierno tras confirmar que tiene VIH, pues aseguró ser víctima de discriminación cuando sus compañeros de la escuela se enteraron y, al ser homosexual abiertamente, la situación empeoró. “Descubrí que tenía VIH en la escuela, durante una jornada de pruebas. Un amigo que se enteró, se lo contó a todos, por lo que mi mundo se alejó de mí”, dijo.
Aunque recibió ayuda psicológica para enfrentar la enfermedad, no fue suficiente y cayó en una depresión, que lo impulsó a querer suicidarse en más de una ocasión. “Intenté quitarme la vida por el acoso y la discriminación por mi condición. Afortunadamente siempre tuve el apoyo de mi familia que me ayudó a salir adelante. Ahora estoy mucho mejor, controlado con medicamentos y he retomado mi vida”.
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CG