De cada 10 alertas emitidas al servicio de emergencias 911 en el municipio de Benito Juárez, ocho tienen que ver con taxistas, quienes, en algunos casos, son víctimas de algún delito y en otros, son quienes cometen atracos, violaciones o venta de droga, según las estadísticas de la Secretaría de Seguridad Pública y Tránsito Municipal.
Trabajadores consultados por este medio, integrantes del Sindicato de Taxistas 'Andrés Quintana Roo', reconocieron que las agresiones en contra de algunos de sus compañeros se dan porque “están metidos en cosas malas”. En contraparte, un ruletero expresó su temor de salir a trabajar, pero aseguró que no tiene otra opción.
El sábado fueron asesinados dos taxistas. Uno fue encontrado sin vida en una calle de terracería sobre la carretera nacional Cancún-Leona Vicario, en el kilómetro 286. Según las primeras investigaciones, fue privado de la libertad por varios sujetos cuando cambiaba una llanta de su auto en el Boulevard Kukulcán de la Zona Hotelera de Cancún.
Posteriormente, el trabajador del volante fue encontrado sin vida la tarde del sábado, con varios disparos en la cabeza y con lesiones en el cuello hechas con arma blanca. Además, tenía las manos amarradas hacia atrás.
El mismo día, otro ruletero, en esta ocasión del Sindicato Gustavo Díaz Ordaz de Isla Mujeres, fue asesinado a balazos cuando circulaba sobre un camino de terracería que lleva a la carretera Ramal Norte, cerca del basurero de Cancún, en la Zona Continental de Isla Mujeres. Los responsables al parecer viajaban a bordo de un vehículo de color dorado, el cual no fue localizado.
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El domingo por la noche, otro taxista, quien venía de un festejo del Día de las Madres, fue asaltado y golpeado brutalmente junto con una mujer y un compañero, en una carretera de terracería que une la avenida principal de Puerto Juárez con la avenida Kabah.
Estos casos han preocupado a los trabajadores del volante. En entrevista con un integrante del Sindicato de Taxistas 'Andrés Quintana Roo', afirmó que es preocupante la ola de violencia que últimamente se ha desatado sobre el gremio. Sin embargo, reconoció que, a pesar del temor, tienen que mantener a sus familias aunque arriesguen la vida en ello.
“Yo, cada vez que salgo me encomiendo a Dios. Sí tenemos miedo, pero qué podemos hacer, debemos darle de comer a la familia”, expresó con preocupación.
El transportista agregó que tiene suerte, debido a que trabaja el taxi solo, por lo que termina su labor a las seis de la tarde.
“No trabajo de noche. Eso me ayuda a sobrellevar esta situación. El problema es mayor para los compañeros que trabajan en dos turnos y el de la noche es quien se arriesga”, admitió.
Sobre las recomendaciones que les dan sus dirigentes en estos tiempos, expresó que una de ella es que no trabajen de noche los que no tengan que hacerlo y los que lo hagan, que tengan mucho cuidado y no laboren por la madrugada.
Finalmente, dos trabajadores del volante pusieron el dedo en la llaga y comentaron, sobre la crisis de inseguridad que los aqueja: “si no andas en cosas malas no te pasará nada. Eso es lo único que te podemos comentar sobre este asunto”, expresaron, mientras esperaban que les lavaran las unidades de alquiler en un autolavado.
El año pasado, según reportes policiacos, presuntamente, los taxistas estuvieron relacionados con 47 delitos de narcomenudeo, 38 asaltos, 18 participaciones en homicidios dolosos, 15 asesinatos relacionados con presuntos nexos con grupos armados, 12 agresiones sexuales, cuatro violaciones, nueve agresiones y tres intentos de privación de la libertad.