Por unanimidad de votos, expulsan de la Unión Ganadera Regional (UGR) al presidente de la Asociación de Ovinocultores, Florencio Song Solís, actual encargado de despacho de la delegación estatal de la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (Sader), porque haberle causado mucho daño a la organización.
Los presidentes de las 18 asociaciones ganaderas que conforman la UGR aprobaron la expulsión del gremio del presidente de la Asociación de Ovinocultores, Florencio Song Solís; asimismo, alertan al superdelegado federal en Quintana Roo, Arturo Abreu Marín, para que realice un inventario de los bienes con que cuenta el edificio de la delegación de la Sader, ya que Florencio Song Solís podría agenciárselos, como lo hizo en la sede de la UGR cuando estuvo al frente.
De acuerdo con la información que se manejó en la asamblea de ganaderos, la expulsión de Florencio Song Solís del organismo ganadero se debe a que durante su mandato se apoderó de una planta productora de alimentos balanceados, la cual fue aportada por los gobiernos federal y estatal para los ganaderos, pero la instaló en su rancho y nunca produjo un kilo de alimento bovino.
Otro activo del que se adueñó, fue el centro de acopio y de engorda de borregos, que fue gestionado como apoyo para los productores; sin embargo, lo construyó en un terreno de su propiedad.
También se adjudicó la Sociedad Financiera de Objeto Múltiple (Sofom), mejor conocida como “banco ganadero”, donde defraudó a los productores con el engaño de que sería una institución financiera para beneficio de los ganaderos, pero nunca entregó cuentas y muchos menos créditos, ni regresó la totalidad de los 2.7 millones de pesos aportados por los productores.
En 1993, el Gobierno del Estado impulsó un proyecto de cría de avestruces, pero él, desde una dirección de la Secretaría de Desarrollo Agropecuario del Estado, se lo agenció y nunca entregó cuentas.
Otro proyecto que también terminó en manos de Song Solís fue el de trasplante de embriones de unos borregos de la raza Dorper que trajeron de África, que según era para apoyar con genética los ejemplares de los ovinocultores; sin embargo, él se agenció los vientres, sementales y los embriones.
Por todas estas malversaciones, en la asamblea del 30 de abril, Florencio Song Solís, por unanimidad de votos, fue expulsado de la UGR y advierten al superdelegado que vigile muy de cerca los bienes de la delegación de la dependencia.
Finalmente, el presidente de la Asociación Ganadera de San Pedro Peralta, Jesús Polanco Castillo, afirmó que con Florencio Song Solís no se combate la corrupción, sino que la premian, pues se nombró a una persona con un oscuro historial, a un bribón.
Síguenos en Google News y recibe la mejor información
JG