Comenzó la demolición del estadio Beto Ávila de Cancún, mientras tanto un grupo de ciudadanos encabezados por Tania Amaro y Arturo Fernández, a manera de protesta, levantaron firmas en defensa de las canchas de tenis “Pancho” Contreras y las de fútbol “Cozumel” y Guillermo Cañedo, las cuales a decir de los manifestantes están incluidas en el plano de mejoras a la casa de la Tigres de Quintana Roo.
Los ciudadanos bajo el #PorCancun comenzaron a levantar firmas de niños, niñas y adolescentes a un costado de las canchas de tenis donde colgaron una lona en la que se oponían a la destrucción y reubicación de las canchas municipales ya que son un patrimonio deportivo de la ciudad.
Acompañados por el abogado Arturo Fernández, así como por algunas niñas, argumentaron que las canchas construidas en 1979 deben mantenerse en su sitio pues son una necesidad para la práctica del deporte ya que a la semana atienden a más de 5 mil niños y jóvenes.
Estás personas hicieron un llamado a la ciudadanía a que acuda a firmar el documento en el que exigen a la presidente municipal Mara Lezama Espinosa, sea respetados los derechos de los usuarios, principalmente de los infantes, plasmados en la Convención Internacional de los derechos del niño.
Asimismo exigieron su participación en la toma de decisiones sobre espacios dignos para la ciudad, por el derecho de una vida sana con acceso a la recreación y sano esparcimiento.
El documento será entregado en la brevedad posible a la autoridad municipal a fin de que de evitar la demolición de las cuatro canchas, así como la desaparición del campo de fútbol conocido como Cozumel, en la Supermanzana 21 de esta ciudad.
Los trabajos de rehabilitación del estadio cargo de la constructora Maíz Mier continúan y este miércoles con maquinaria pesada comenzó la demolición de la grada preferente de primera base, así como de la entrada principal que quedó en puros fierros retorcidos y escombros. Vale la pena recordar que remodelación del inmueble se realizará con inversión del gobierno federal a través de la Secretaria se Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (SEDATU) con un monto de licitación por 176.8 millones de pesos.
El estadio Beto Ávila, casa de los Tigres fue inaugurado el 23 de noviembre de 1980, con una capacidad de cuatro mil espectadores, teniendo a la fecha una vida útil de 41 años; con más de una remodelación y una capacidad actual de nueve mil 500 espectadores.
De acuerdo a la SEDATU, el plazo de ejecución del proyecto integral de obra pública será de 170 días naturales (alrededor de seis meses), contados a partir del día hábil siguiente al de la formalización del contrato respectivo.