Los líderes del ejido Juan Sarabia pretenden sabotear el proyecto del Tren Maya, exigiendo a los 597 comuneros que rechacen la oferta de indemnización por las 75 hectáreas que ocuparán para esa construcción, que les harán las autoridades estatales el próximo fin de semana, durante su asamblea, indicaron pobladores.
Lauro Cantú Galindo y Marcos Jiménez Potenciano, Presidentes, actual y electo del Comisariado Ejidal, respectivamente, junto con Ernesto Haro Gutiérrez, exdirigente agrario, “están boicoteando los acuerdos establecidos con los funcionarios federales respecto al precio por metro cuadrado de las tierras que se ocuparán para el proyecto ferroviario”, expusieron.
Y es que convocarán a una junta a 150 ejidatarios para convencerlos de rechazar la oferta pactada hace una semana y exigir más dinero, lo que pondría en riesgo la negociación y ocasionar que el Gobierno Federal, que encabeza Andrés Manuel López Obrador, retrase los pagos; o peor aún, expropie las tierras y les paguen una cantidad inferior a la acordada.
Como ha pasado en otras ocasiones, expresaron, Ernesto Haro, el “patrón” de Jiménez Potenciano y Cantú Galindo, quieren manejar esos recursos para “jinetearlos” y pagarles a su antojo, e incluso descontarles “gastos fantasmas”, como sucedió con la indemnización de la Secretaría de Comunicación y Transporte, cuando les quitaron parte del dinero por un supuesto pago a un abogado.
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Como se recordará, el Tribunal Unitario Agrario 44 ordenó que se devolviera el 10 por ciento descontado a los ejidatarios por el pago de dicha indemnización, lo que no ha sucedido, por lo que señalaron, que el actual Presidente del Comisariado Ejidal estaría cayendo en desacato, y lejos de cumplir la orden y a propuesta de Fidel Guillén, miembro de ese núcleo y ordenado por Haro Gutiérrez, quieren expulsar a quienes demandaron la devolución que se les retuvo ilegalmente.
“Tanto Haro como Jiménez Potenciano fueron acusados de despojo de tierras a adultos mayores y de entregar tierras a políticos a cambio de impunidad e influyentismo, como sucedió con Luis Alegre, entre otros, quienes junto con Fidel Guillén, otro vividor de la política en el Sur del Estado, apoyaron abiertamente a Laura Fernández en el pasado proceso electoral, a pesar de presumir que eran ‘morenistas’ y ‘maristas’ de corazón, afirmaron.
Dijeron que es importante que “los funcionarios federales responsables del Tren Maya y el enlace político para quitarle obstáculos al proyecto, que ahora recae en la Senadora Marybel Villegas Canché, tras el fracaso de Luis Alegre, tendrán que estar muy atentos, pues al frente de este ejido hay una horda de vividores, fraudulentos y traicioneros que han abusado de los campesinos de Juan Sarabia, por gozar de cierta impunidad gracias a la corrupción e influyentismo de ciertos políticos”.
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NR