Quintana Roo

Cancún: Locatarios del Mercado 23 ignoran a la Profeco; encarecen productos básicos

A través de un recorrido por el Mercado 23, se pudo constatar que los precios de productos de la canasta básica rebasan hasta en 30 por ciento los fijados por la dependencia
La Procuraduría Federal del Consumidor establece un importe máximo de 39 pesos para el kilo de frijol, pero en el Mercado 23 se expende hasta en 60 pesos / David Pérez

Los productos de la canasta básica en Quintana Roo sobrepasan el precio marcado por la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) para la región, de acuerdo con el último informe de la sección ¿Quién es quién en los precios?.

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Durante un recorrido realizado por el equipo de Por Esto! en el Mercado 23, se pudo constatar que las mercancías están encarecidas hasta 30 por ciento en comparación con lo que marca la plataforma para Cancún.

Tal es el caso del frijol, para el cual Profeco marca un importe máximo de 39 pesos, sin embargo, en el mercado se expende hasta en 60 pesos; lo mismo pasa con el maíz, ya que la dependencia señala que se debe de vender en 12 pesos, mientras que en los locales de Cancún está hasta en 16 pesos.

En la opinión de los ciudadanos, los costos han aumentado mucho en los últimos meses y sienten que cada vez les cuesta más comprar lo indispensable para sobrevivir y mantener a sus familias.

“Nos parece que los productos de la canasta básica están encarecidos aquí en Cancún, cada vez cuesta más trabajo conseguir lo esencial para alimentarte, venimos al mercado porque consideramos que está más barato, ahora imagínate los precios de los supermercados”, dijo Azucena Ortiz.

Otro caso es el paquete de huevo con 12 piezas; la Profeco marca un precio máximo de 28 pesos; sin embargo, en los locales de la ciudad se vende en 33 pesos; el papel de baño no debería costar más de 28 pesos, pero se comercializa en 36 pesos.

Los habitantes lamentaron que los locatarios no respeten los precios que marca la Profeco, pues consideraron que es excesivo el aumento y ellos son los únicos perjudicados, ya que cada vez les alcanza menos para surtir su despensa y cubrir sus necesidades básicas.

“Es un abuso por parte de los vendedores, vivir en Cancún es muy caro y el alza de precios hace la vida más difícil todavía, ahora sí que sólo sobrevivimos, pues antes alcanzaba para comprar más cosas”, dijo Josefina Cruz.

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JG