Los obreros que están en el magno proyecto del Tren Maya en Villas del Sol, han puesto al fin las placas de cemento en para terminar de realizar los puentes por donde pasará el ferrocarril más rápido del Sureste; aunque los únicos inconvenientes son las constantes desviaciones que los automovilistas tienen que hacer en las avenidas principales para cruzar del Poniente de la ciudad.
“Ahora cuando caminamos y miramos hacia arriba, vemos que en el puente ya no traspasan los rayos del sol, ya pusieron esas bases de concreto que tapan las vigas que están sostenidas en los pilares del puente; apenas llevan de haberlo instalado exactamente una semana”, dijo la vecina Viridiana García.
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La ciudadana playense destacó que ella y el resto de los vecinos han visto cómo han agilizado los trabajos los ingenieros y que en este periodo es cuando ya ingresa la cuenta regresiva para que por fin pueda transitar el ferrocarril.
Indicó que una de las problemáticas es el ruido que trajo la obra, al principio era insoportable para los que viven cerca del puente, pero pasados los meses, los vecinos se han acostumbrado.
Viridiana García dijo que el ruido que ahora es molesto para los lugareños es por los tractores, pero principalmente por los camiones pesados que a diario están cruzan la avenida CTM para ir dirigirse a todo el derrotero del Tren Maya.
Asimismo, el ciudadano, Raúl Silverón comentó que hay más expectativas para que la gente que vive en Villas del Sol pueda ver a diario pasar el Tren Maya, pero de igual forma, existe la duda sobre cómo cambiará la circulación vehicular de las calles.
El playense mencionó que ahora que han cerrado por completo el carril de descenso hacia el centro y dividido una de las vías de la avenida CTM, se forma un “cuello de botella”, que hace más complicado transitar a los choferes de los camiones de transporte de personal de los hoteles y centros turísticos, así como a algunos distribuidores de productos de tiendas de conveniencia.
Raúl Silverón fue quien comentó: “lo que está dificultando la obra del Tren Maya es el tráfico, está aumentando ahora más que nunca, y me da la impresión que también por la misma obra hay más movimientos de automovilistas que, solo por curiosidad pasan en sus automóviles para ver cuánto tiempo más falta para que ya se termine el puente”.
Los dos empleados del Tren Maya comentaron que lo único que los puede retrasar son las precipitaciones pluviales, porque el polvo de la construcción que falta por cubrir se desmorona por las lluvias. Cabe mencionar que, pudo verse que en estas bases de puentes los albañiles e ingenieros decidieron colocar maderas en algunas de estas bases de concreto para tapar ciertos espacios que quedaron, además para no desperdiciar el material que tenían a un costado de la avenida.
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HS