El ambulantaje, es decir, la venta de mercancías de manera informal en las playas, es una actividad que afecta el medio ambiente, la seguridad y la imagen de los destinos turísticos. Por esta razón, las autoridades han prohibido el ambulantaje en los arenales en Playa del Carmen, una de las zonas más visitadas de la Riviera Maya.
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Según la Ley General de Bienes Nacionales, los arenales son parte de la Zona Federal Marítimo-Terrestre (Zofemat), que es un bien de uso común y de libre acceso para todos. Los concesionarios de esta zona, como los hoteles y los clubes de playa, deben respetar ciertos metros de playa frente a sus edificios y permitir el libre tránsito de las personas. Además, deben cumplir con el decreto presidencial de octubre de 2020, que garantiza el acceso público a las playas y prohíbe cualquier tipo de obstrucción o restricción.
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La razón
Sin embargo, algunos concesionarios han instalado rejas, postes, sogas y camastros para delimitar su área de playa y evitar el paso de los ambulantes y de los visitantes que no sean sus huéspedes. Esta práctica es ilegal y viola el derecho de todos a disfrutar de las playas. Por otro lado, los ambulantes también incumplen la normatividad al ofrecer sus productos sin permiso ni control sanitario, lo que genera contaminación, competencia desleal y riesgos para la salud de los consumidores.
Ante esta situación, la Dirección de la Zofemat en Solidaridad, el municipio al que pertenece Playa del Carmen, ha iniciado un proceso de ordenamiento y delimitación de la zona federal, con el apoyo de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) y la Dirección General de Zona Federal Marítimo-Terrestre y Ambientes Costeros (Zofematac). El objetivo es garantizar el cumplimiento de la ley, sancionar a los infractores, retirar la infraestructura ilegal y habilitar los accesos públicos a las playas. Así, se busca preservar el patrimonio natural, la seguridad y la calidad de los servicios turísticos en Playa del Carmen.
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AT