Este fin de semana se entregó a los habitantes de Bacalarel informe técnico para la construcción de las vías del Tren Maya que cruzará por el Estero de Chac. Mediante este informe se garantiza que no se generarán daños al ecosistema. Los habitantes de la localidad lo están evaluando con el objetivo de evitar cualquier impacto negativo.
María Luisa Villarreal Sonora, designada por el comité formado para proteger el Estero de Chac, informó que a la reunión más reciente acudieron representantes del Gobierno Estatal, incluyendo la Secretaría de Gobierno, la Secretaría de Medio Ambiente, la Secretaría de Obras Públicas y la Secretaría de Turismo. También asistieron representantes del Ayuntamiento de Othón P. Blanco, a través de una regiduría.
La reunión contó con la presencia de miembros de la Canaco, Colegio de Ingenieros de Quintana Roo, CMIC, Amexme, AMPI, Canirac, Asociación de Hoteles del Sur de Quintana Roo, Asociación de Hoteles de Bacalar, CCE y especialistas en ecología y biología del Instituto Tecnológico de Chetumal. Por parte del Proyecto Tren Maya, asistieron los oficiales de la Sedena responsables del tramo, el IMTA, que brinda apoyo en el seguimiento de aspectos medioambientales, y el Instituto Nacional de Ecología, que actúa como asesor permanente del proyecto en asuntos ambientales.
El Comité Ciudadano destacó tres principios claros: su acuerdo y apoyo a un proyecto bien construido del Tren Maya, el rechazo a la construcción de Áreas Naturales Protegidas (ANP) en el estero o la laguna, así como en cualquier parte de la zona, y la falta de intención de establecer un sitio Ramsar en la zona, ya que esto impediría el desarrollo económico de la región.
El personal de la Sedena presentó las acciones ambientales que se están llevando a cabo, así como las especificaciones técnicas de ingeniería para los puentes, teniendo en cuenta las condiciones de los humedales de la zona, y las autorizaciones en materia de impacto ambiental y cambio de uso de suelo forestal.
Además, se presentó la propuesta de trabajo del Comité de Apoyo Técnico, que forma parte del Comité Ciudadano. Ingenieros civiles, arquitectos y biólogos realizaron un análisis detallado de la situación y propusieron diversas recomendaciones. Estas recomendaciones incluyen el cumplimiento de los términos y condiciones de la Manifestación de Impacto Ambiental (MIA) y el Estudio Técnico Justificativo (ETJ), así como la instalación de infraestructuras verdes de amortiguamiento para proteger las obras del Tren Maya, en línea con los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la Agenda 2030. También se propuso fortalecer el proyecto como una herramienta de ayuda a la población civil en casos de desastre, e integrar obras de movilidad regional e interurbana que se vinculen con el Tren Maya para generar una mayor derrama económica.
Se acordó la creación de una mesa permanente de trabajo entre la Sedena, los miembros del Comité Ciudadano y los actores locales del Gobierno y los centros de educación superior locales. Además, se estableció una mesa técnica permanente (ingeniería ambiental). También se acordó elaborar y poner en marcha una estrategia permanente de comunicación y transparencia hacia la ciudadanía, que incluirá notas, informes, videos y visitas organizadas a los diferentes sitios del proyecto para los grupos ciudadanos y las universidades locales interesadas en conocer el proyecto, entre otros aspectos importantes.
El objetivo principal de estas acciones es evitar cualquier tipo de daño al ecosistema y al Estero de Chac, que durante muchos años ha funcionado como una salida natural de la Laguna de Bacalar hacia la Bahía de Chetumal.
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NR