Los residentes y proveedores de servicios en laisla de Holbox han insinuado que están considerando buscar asesoramiento legal para emprender una posible demanda contra la Comisión de Agua Potable y Alcantarillado (CAPA). Esta decisión surge como respuesta a la frustración causada por la distribución insatisfactoria de agua durante todo el período de vacaciones, en el que incluso hubo días en los que el suministro de agua fue completamente deficiente.
Los quejosos señalaron que los líderes de CAPA en Lázaro Cárdenas parecen estar más enfocados en eventos políticos y en mostrar su presencia en redes sociales que en atender sus responsabilidades. A pesar de que la preocupación sobre los constantes cortes de energía se manifestó incluso antes de las vacaciones, la comisión no tomó medidas para asegurar un suministro constante de energía para mantener en funcionamiento el pozo en Chiquilá, que es fundamental para el suministro de agua a la isla turística.
La ira previamente dirigida hacia la Comisión Federal de Electricidad (CFE) ahora se está dirigiendo hacia CAPA. Durante estas vacaciones, los habitantes y los proveedores de servicios tuvieron que lidiar con días sin servicio de agua, lo que afectó sus actividades diarias y su capacidad para operar de manera normal.
A pesar de que CAPA ha intentado evadir la culpa al culpar a la CFE por su servicio deficiente, que impide el funcionamiento de las bombas de agua en el puerto de Chiquilá, es evidente que también tienen su cuota de responsabilidad debido a la negligencia de los encargados.
Los denunciantes mencionaron que no es ningún secreto que durante al menos cinco años ha habido escasez de agua durante las temporadas vacacionales. Para abordar este problema, se construyó un pozo que abastece directamente a la isla desde el puerto de Chiquilá. Sin embargo, las fallas en el servicio eléctrico siempre han sido un factor complicante.
A pesar de esto, los responsables de CAPA en Lázaro Cárdenas parecieron pasar por alto la importancia de gestionar una planta de energía para garantizar un suministro constante de agua tanto para los residentes como para los cientos de turistas que visitan la isla en vacaciones. Parece que están dispuestos a esperar hasta que el pueblo tome medidas extremas de presión antes de considerar y abordar las quejas y problemas.
Se criticó al encargado de CAPA, Carlos Dzul, quien parece estar más involucrado en eventos del gobierno estatal o de Morena que en atender las demandas de los ciudadanos en todo el municipio, especialmente en la isla de Holbox. Aquí, la falta de agua es un problema recurrente debido a las deficiencias en el suministro de energía eléctrica y la falta de una planta eléctrica de respaldo.
Además, se mencionó que, a pesar de los días sin agua, CAPA ya ha enviado facturas de consumo que registran aumentos de más del doble o el triple de lo habitual. Esta situación ha generado enojo entre los residentes y proveedores de servicios, lo que los hace contemplar la posibilidad de buscar asesoría legal y presentar una demanda contra la dependencia debido a su negligencia y abuso. A esto se suma la frustración existente hacia la CFE, que también enfrenta problemas similares de servicio deficiente y tarifas abusivas.
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AA