Las labores del campo en el Sur del Estado tendrán que suspenderse por lo menos dos o tres semanas, como consecuencia de las lluvias, pues no se permite la entrada de maquinaria ni camiones a las parcelas, que podrían quedar atascados y causar daños en los sembradíos, aseguró Benjamín Gutiérrez Reyes, Presidente de la Asociación de productores de caña de azúcar.
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Dijo que las persistentes lluvias que han azotado el sur de Quintana Roo han generado complicaciones significativas en las labores agrícolas, obligando a suspender temporalmente las actividades en los campos. Esta decisión se tomó ante el riesgo de dañar los sembradíos y la imposibilidad de ingresar maquinaria y camiones a los terrenos anegados.
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Se espera que esta situación se prolongue por un mínimo de dos o tres semanas, lo que ha generado preocupación entre los agricultores locales, quienes dependen en gran medida de estas tierras para su sustento y la producción de alimentos esenciales para la comunidad.
Aunque por ahora el ingenio está moliendo la caña que ya había sido ingresada, si las precipitaciones pluviales no frenan y los campos siguen encharcados, será muy difícil sacar la vara dulce.
Señaló que las lluvias intensas han saturado el suelo, convirtiéndolo en un terreno propicio para atascos de maquinaria y vehículos de transporte. El acceso a los campos se ha vuelto extremadamente difícil y los agricultores han optado por la suspensión temporal de las labores para evitar posibles daños irreparables en los cultivos.
“Esta situación es realmente complicada para nosotros, las lluvias han sido constantes y torrenciales, y nuestras tierras están completamente anegadas, no podemos arriesgarnos a dañar nuestros equipos y perder nuestros cultivos”, expresó Gutiérrez Reyes.
La decisión de suspender las actividades agrícolas ha sido respaldada por los productores locales, quienes reconocen la importancia de preservar las inversiones y garantizar la seguridad de sus medios de vida. Se espera que las instituciones pertinentes brinden apoyo a los afectados durante este período de inactividad forzada.
Además del impacto directo en la producción agrícola, la suspensión del trabajo puede tener repercusiones en la economía local, ya que muchos habitantes dependen de la agricultura como fuente principal de empleo, principalmente de la siembra y cosecha de la caña.
Expertos en meteorología indicaron que las condiciones climáticas adversas podrían persistir en los próximos días, por lo que se recomienda a la población mantenerse informada y seguir las indicaciones de las autoridades locales.
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AT