La aerolínea Volaris la volvió a hacer, y vendió boletos sin asiento. Al menos así lo hizo a una familia guatemalteca, compuesta por cinco integrantes, que debía retornar este viernes a su país en un vuelo directo desde Cancún, donde estuvieron vacacionando unos días.
Sin embargo, una vez en la Terminal 2, personal de la aerolínea les indicó que sus boletos no tenían asientos y les ofrecieron otro vuelo para el sábado, pero debían regresar por temas personales este viernes, así que acudieron a información para ser orientados, hasta que fueron canalizados al módulo de la Procuraduría para la Defensa del Consumidor (Profeco) donde resolvieron favorablemente el asunto y en pocos minutos.
Resulta que la familia llegó más de dos horas y media antes al aeropuerto para documentar su equipaje, pero “nos dicen que nuestros boletos no tienen asientos, o sea, es ridículo, y que nos los pueden cambiar para otro día, pero debemos regresar de emergencia. Nos están esperando y nos quieren dar un vuelo para mañana y además con escala”, indicó molesta la madre de familia
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Comentó que los boletos los adquirieron hace tres meses, ida y vuelta, y sin escalas, por lo que no querían aceptar el cambio porque de seguro hoy tampoco habría y no podían esperar tanto. “Están locos. Cómo es posible que alguien compre un vuelo sin asientos. En qué cabeza cabe. Somos una familia de cinco”, señaló.
Explicaron que por eso compraron su vuelo con anticipación, ya que no es la primera vez que visitan Cancún, pero con esta experiencia, aseguraron que regresarán, pero no con Volaris.
“Después nos dijeron que el check-in lo debimos hacer con anticipación, pero apenas nos lo enviaron hace 40 minutos, aunque dicen que fue hace tres días. No es justo. Andamos con nuestros hijos menores, pagamos el vuelo y uno confía en la aerolínea, expresaron.
De inmediato acudieron al módulo de la Profeco y la encargada los acompañó con el personal de la aerolínea y fue entonces que la línea cambió de postura y en cuestión de minutos les ofreció más opciones; una de ellas fue ir directo a la sala y esperar para ver si en algún vuelo hacia Guatemala y directo, había lugares disponibles y en caso de no haberlos, que sería el peor de los casos, esperar a mañana, pero la aerolínea se haría cargo de los gastos que eso generara.
Es importante mencionar que cada vez es más recurrente que esta aerolínea haga sobreventa de vuelos y pese a las quejas de los pasajeros, el personal lo sigue haciendo y la compañía no hace nada por evitarlo, sumando así, más puntos negativos en su ya de por sí oscuro historial.
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