De nueva cuenta, la aerolínea VivaAerobus fue acusada de sobrevender asientos, y en esta ocasión una familia de cuatro integrantes fue la afectada, pues su vuelo estaba programado la tarde de ayer, hacia la ciudad de Tijuana, pero al intentar hacer el “check in” desde su computadora no se le permitió, por lo que decidió acudir a la Terminal 2 delAeropuerto Internacional de Cancún (AIC) al menos cinco horas antes del vuelo, para ir directamente a los mostradores de la compañía, donde le confirmaron, que no tenían asientos asegurados, generando su molestia.
Acto seguido, Irene Z, quien llegó sin su familia a la terminal aérea, decidió ir a quejarse directamente al módulo de la Procuraduría de la Defensa del Consumidor (Profeco), donde fue asesorada, pero aseguró que no es la primera vez que eso le sucedía con esta aerolínea, que es la que más quejas acumuló el año pasado a nivel nacional, no sólo por la clásica sobreventa de asientos, —que aparentemente es permitida si no se exceden del cinco por ciento—, sino por el cobro por el equipaje de mano, que no está permitido, aunque en el caso de VivaAerobus son muy recurrentes estos temas; además los clientes coinciden en que el personal ya está muy adoctrinado y con la mano en la cintura les dicen que “el vuelo ya está cerrado”.
Acuden a Profeco
Esta aerolínea lleva operando casi 16 años, pero ha sido expuesta en numerosas ocasiones por sus pasajeros debido a un servicio de mala calidad. Otras reclamaciones muy frecuentes son cancelación de vuelo, pérdida de equipaje o equipaje dañado, vuelo demorado, cambio de itinerario y negativa a devolución del pago por el boleto.
Ante ello, la Profeco advierte al consumidor que es de suma importancia que antes de comprar boletos para viajar se cerciore de leer todos y cada uno de los términos y condiciones de la aerolínea, además de revisar cuáles son las políticas de compensación para que se respeten los derechos de los pasajeros, como descuentos en el boleto, transporte sustituto en el primer vuelo con disponibilidad, hospedaje, atención médica básica, reembolsos, indemnizaciones o vales de comida y bebida.
Apenas el lunes, cinco pasajeros que viajaban de la Terminal 2 hacia el Bajío, también tuvieron problemas con sus asientos que se habían sobrevendido; a uno de ellos prácticamente le obligaron a comprar un nuevo boleto, aunque al final de cuentas, y por la intervención de la Profeco, le devolvieron el dinero gastado y los cinco pudieron volar a su destino, pero varias horas después, y estos casos son prácticamente todos los días,; tan solo el año pasado, las quejas fueron más de mil a nivel nacional y aunque durante el primer trimestre del 2024 han sido pocas, no es porque no existan irregularidades, sino porque se resuelven en el momento y la Profeco ya no las contabiliza.
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