Los hogares de Quintana Roo enfrentan otra crisis económica debido al alza significativa en los precios de frutas, verduras, gasolina, leche y boletos de avión, lo que ha disparado la tasa de inflación anual a un 4.78% al cierre de la primera quincena de mayo en el país, de acuerdo con el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
Noticia destacada
Candidato a la Alcaldía de José María Morelos, Quintana Roo, declina a favor del candidato del Partido Verde
Este incremento marca la tercera alza quincenal consecutiva, reflejando un panorama cada vez más complicado para los quintanarroenses.
Los precios de frutas y verduras muestran un aumento del 20%, afectando de manera significativa el poder adquisitivo de las familias. El aguacate y el huevo, productos esenciales en la dieta de los mexicanos, registraron incrementos de entre el 2% y el 15%, lo que agrava aún más la situación.
A estos incrementos se suman de la gasolina y la leche, además de un encarecimiento del 10% en los boletos de avión, factores que presionan considerablemente el presupuesto familiar.
El costo de la vivienda, aunque con un incremento menor del 0.22%, también ha contribuido al aumento general de la inflación. Este contexto se ve exacerbado por el hecho de que la mayoría de los productos en Quintana Roo son importados de otras Entidades, lo que incrementa su precio al ser puestos a la venta al público local.
Los genéricos con mayores incidencias en la quincena fueron el jitomate (10.44%), chile serrano (13.99%), transporte aéreo (9.77%) y huevo (2%). Los que registraron menores incidencias fueron electricidad (-21.45%), cebolla (-13.19%), gas LP (-1.13%), tomate verde (-8.18%) y melón (-13.65 por ciento), precisó.
La situación se complica aún más con los recientes incrementos en los costos de servicios básicos, como el agua potable y la electricidad.
A diferencia de otras Entidades, Quintana Roo no fue contemplada para recibir el subsidio de la Comisión Federal de Electricidad (CFE) con la llamada tarifa de verano, lo que ha generado un detrimento adicional en la economía de las familias locales.
La falta de este subsidio significa que los hogares quintanarroenses deben enfrentarse a facturas de electricidad más altas en los meses de mayor consumo, incrementando la presión sobre sus ya ajustados presupuestos.
Los hogares de Quintana Roo viven una crisis económica complicada debido al aumento constante de precios en productos esenciales y servicios.
La falta de subsidios y la dependencia de productos importados agravan el panorama, dejando a las familias en una situación cada vez más difícil.
Síguenos en Google News y recibe la mejor información
JY