El costo de la vivienda en Cancún ha dejado de ser asequible para las empresas constructoras, con precios que superan el medio millón de pesos, una cifra inalcanzable para muchos trabajadores.
Ante esta situación, la industria privada de la construcción busca acuerdos con los 11 municipios de Quintana Roo para ofrecer viviendas de interés social que no excedan los 700,000 pesos, un límite más alcanzable para los derechohabientes del Infonavit.
Leonardo Garrido, dirigente estatal de Canadevi, informó que ya han alcanzado un primer acuerdo en el municipio de Othón P. Blanco, donde el Ayuntamiento ha accedido a eximir de derechos y trámites municipales, lo que reduce el costo final de la vivienda hasta en 600,000 pesos.
El empresario constructor señaló que Quintana Roo se encuentra entre los primeros lugares a nivel nacional en costos de trámites de vivienda, tanto municipales como estatales, lo que ha elevado significativamente los costos de construcción y, por ende, el precio final. Esto ha provocado una escasez de oferta de viviendas por debajo de los 700,000 pesos en todo el Estado.
En comparación con Yucatán, donde se requieren alrededor de 500 trámites para actividades económicas, en Quintana Roo se suman hasta 1,500 requisitos gubernamentales, según Garrido Hurtado.
Esta situación significa que alrededor de 100,000 trabajadores que cumplen los requisitos para acceder a una vivienda deben esperar, ya que el Infonavit solo puede otorgar 12,000 créditos al año.
Según Víctor Hugo Ducoing Pedroza, gerente de Crédito del Infonavit, la construcción de viviendas de interés social ha comenzado a recuperarse tras los efectos de la pandemia, pero aún no es suficiente para satisfacer la demanda. Quintana Roo reporta la construcción de apenas 200 viviendas en promedio al mes, mientras que en años anteriores se llegaron a consolidar más de mil viviendas mensuales.
Reconociendo esta situación, Ducoing Pedroza destacó que los desarrolladores están orientando sus esfuerzos hacia viviendas de interés medio o residencial, donde actualmente se encuentra la mayor demanda del mercado.
Esto ha dejado desatendidos en Quintana Roo a más de 70,000 trabajadores que no pueden adquirir una casa, según los informes de la Cámara Nacional de la Industria de Desarrollo y Promoción de Vivienda.
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GC
