Una de las principales problemáticas que enfrentan los pacientes oncológicos es la falta de donación de sangre, sobre todo para los diagnosticados con leucemia, pues una vez que ingresan al hospital utilizan entre 40 y 60 unidades y no hay familia que tenga esa cantidad de parientes, amigos o conocidos que estén dispuestos a donar.
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Además, no toda la sangre que se recauda es apta, y por ello se necesitan reforzar las campañas dirigidas a la sociedad y romper con los mitos que hay alrededor de este tema, dijo Georgina González, directora de la Asociación Mexicana de Ayuda a Niños con Cáncer en Quintana Roo, donde atienden a 100 menores con este padecimiento.
La también activista señaló que para las familias es un proceso muy largo, entre el estrés de saber que su pariente está enfermo, y todos los requisitos que se requieren para una transfusión, aunado a los estigmas que hay entre la población.
Es por ello, dijo, que trabajan con universidades, como el Tecnológico de Cancún, en febrero pasado, o la Anáhuac, donde les apoyan cada semestre con campa- ñas entre su alumnado.
Señaló que también los ayudan los bancos de sangre, donde les explican los procesos y beneficios que trae para los pacientes, ya que pueden marcar una diferencia entre la vida y la muerte.
Por su parte, Jazmín López Zavaleta, responsable del Banco de Sangre del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), de la clínica 17 en Cancún, señaló que reciben alrededor de mil 100 donantes al mes, de los cuales menos del uno por ciento es altruista y el resto, de reposición o familiares de un paciente hospitalizado. Además, de esa cantidad, sólo entre 500 y 550 son aptos para la transfusión.
El primer paso en la donación es la captura de datos y de la información general de la persona.
En el caso de familiares de un paciente, se requiere su nombre.
Después pasan a una revisión de ambos brazos para ver si cuentan con una vena adecuada para obtener una muestra que se utiliza en la biometría hemática. Luego van a una consulta dirigida a los factores de riesgo de enfermedades trasmisibles a través de la sangre y se revisa en los laboratorios para saber si son candidatos o no.
En caso de cumplir los requisitos, los canalizan a la zona de sangrado para obtener la unidad, siendo un proceso rápido y sin complicaciones, salvo algún mareo, lo que es normal.
Al finalizar se les deja en reposo y se les da un alimento para su pronta recuperación.
JY